Aprobado el estudio de viabilidad de la concesión de la futura residencia de mayores de Primero de Mayo
La Junta de Gobierno local de Santander ha aprobado en su reunión de hoy el estudio de viabilidad económica de la concesión durante 40 años para la construcción y explotación de la futura residencia de mayores de Primero de Mayo, que dispondrá de 120 plazas.
El concejal de Servicios Sociales, Álvaro Lavín, ha explicado en nota de prensa que el Ayuntamiento «sigue dando pasos» para la construcción de este centro, tras la modificación del anteproyecto que se había aprobado inicialmente, como consecuencia de la aprobación de la nueva Ley.
El objetivo, según Lavín, es licitar las obras «lo antes posible» para seguir ofreciendo a los mayores nuevos recursos municipales «en aras de mejorar su calidad de vida y sus posibilidades de alojamiento cuando ya no puedan o quieran residir en sus viviendas».
De esta forma, se pondrán a disposición de los santanderinos al menos 120 plazas residenciales, articuladas en cuatro módulos de 30 personas usuarias, en las que se ubicarán dormitorios y cuartos de baños, así como espacios destinados a sala de estar común y comedor.
Igualmente, el centro deberá contar con una zona de servicios generales, que incluirá todas las dependencias destinadas a la gestión y funcionamiento del centro y una zona de espacios comunes en la que los residentes podrán desarrollar actividades diversas, tanto asistenciales como de relación social.
La superficie de la parcela es de 5.488 metros cuadrados y el presupuesto estimado para la ejecución de la obra, con una duración estimada de entre 18 y 24 meses, asciende a 5 millones de euros, mientras que el coste del equipamiento se ha valorado en medio millón de euros.
Aunque la probabilidad de que la tasa media de ocupación se aproxime al 100% es muy elevada, el estudio se ha situado sobre el supuesto de que se sitúe en el 95% el tercer año, según ha detallado el concejal.
Lavín ha remarcado que se trata de proporcionar a los ciudadanos un recurso basado en la prestación de servicios adaptados al colectivo de personas mayores, para favorecer su autonomía, desarrollo personal e integración en el medio social, permitiendo su permanencia en su municipio de residencia.
El concejal ha hecho hincapié en que la gran demanda de plazas que existe para este tipo de instalaciones a causa del envejecimiento de la población, ha motivado al Ayuntamiento a proveer de los medios necesarios disponibles con el fin de construir una unidad residencial para la tercera edad, amparada en el uso y destino de prestación de servicios declarados de interés social.
De esta forma, teniendo en cuenta que la población mayor de 65 años de Santander asciende a casi 44.000 personas, la ratio de plazas residenciales por cada 100 usuarios potenciales se sitúa para Santander en 4,51, muy cerca de la Comunidad Autónoma y de la media nacional.