PANORAMA INTERNACIONAL
Llegó el momento de parar
Primer acto: Wall Street se lleva a un cumplidor ciudadano normal a dar una vuelta por alta mar y, en un ataque de pánico vuelca el bote. Segundo acto: el ciudadano, protagonizado por el Congreso, decide responder agarrando a Wall por el cuello y estrujárselo hasta que los dos se hunden en el agua.
Hay mucha urgencia por castigar a los incompetentes y quizá el fraude pero lo que necesita ahora, tanto Europa como EE UU, es esforzarse por llegar a tierra firme. El Congreso americano ha mostrado una catastrófica falta de liderazgo. Mientras los gobiernos europeos se han mostrado capaces de rescatar los bancos individuales con una impresionante velocidad, allí no hay signo de estrategia comprensiva para resolver la crisis ni al nivel de la naciones europeas individuales ni al de la UE como conjunto.
Eso debe cambiar, pues los mercados de dinero están cerrados para los bancos y algunos depositarios pequeños están tan asustados que han vuelto al oro, no como inversión sino para almacenar el valor. ¿Cuál será lo próximo, latas de comida?
Financial Times
La economía real y la crisis
La crisis económica global se está colando en la economía real. Que la situación sea similar en muchas partes del mundo industrializado con la excepción de China es poco consuelo (…)
No parece una caída a escala como la de comienzos de los 90. Los tipos de interés están bajos y la tasa de cambio no ha descendido de forma aguda. Aunque las empresas recortan la inversión y el desempleo crece, las cifras no son ni mucho menos las de entonces.
Para el Banco de Inglaterra la tentación sería reducir los tipos. En la medida en que la confianza entre bancos siga siendo un problema, las tasas más bajas de interés, por sí mismas, no van a liberar más crédito. Sin embargo, el Tesoro debería mantener más dinero en los mercados por medio de algún instrumento especial de liquidez, aumentando el ámbito de activos que estas entidades pueden ofrecer al Banco de Inglaterra como garantía. Y Gordon Brown debería decir más claro que no va a permitir que caiga ningún banco grande.
The Independent
El pago de los ejecutivos
Es fácil de entender por qué en el Congreso de los EE UU y en otros lugares han pedido topes salariales para los ejecutivos de los bancos como condición para aprobar el rescate del sistema financiero por la Administración Bush (…)
Justamente ahora, cuesta mucho mantener la cara seria cuando se leen las palabras ‘talento’ y ‘Wall Street’ en la misma frase y es el momento adecuado para que se reduzcan los salarios en la banca.
Si la decisión del Congreso de poner límites salariales a las empresas es una lección que resulta demasiado vieja, la crisis financiera está enseñando otras nuevas a los accionistas. La primera es: olvídate de pagar a los trabajadores con grandes cantidades de acciones de su propia empresa y asegúrate de que tomen decisiones sensatas. Entregar acciones es caro, porque el capital tiene unos costes de emisión y, además, no se puede pensar que, por poseerlas, los directores de la empresa no van a tomar malas decisiones.
La estructura de los planes de incentivos es más importante que su nivel, sobre todo, en las finanzas. La Autoridad Británica de Servicios Financieros puede pedir a los bancos que pongan más capital si sus estructuras de pago son arriesgadas y eso tiene más sentido que poner topes salariales. Al final, las empresas y los accionistas son mejores para fijar los salarios que los burócratas.
The Economist
Rusia, en el mismo bote
Hacer un vídeo no es hacer política, pero Rusia apoya el que ha hecho Medvedev, donde anuncia 40.000 millones de euros en préstamos para el rescate financiero de Islandia (…)
El Oeste debe reaccionar con cautela pero de forma positiva a la oferta del Kremlin que, con unas reservas de 560.000 millones de dólares en moneda extranjera, puede contribuir a suavizar las tensiones financieras globales (…)
Sin embargo, Rusia ha llegado a la mesa tras darse cuenta tarde que es más vulnerable a las crisis financieras globales de lo que se pensaba. Con este préstamo no ha hecho nada para mejorar su reputación como lugar seguro para la inversión, muy deteriorada tras su intervención en Georgia y, aunque su economía crece al 7%, ¿durante cuanto tiempo lo hará?
No hay mejor base para la cooperación que los propios intereses nacionales. Rusia necesita a la UE tanto como la UE necesita a Rusia. La cooperación financiera puede reavivar las esperanzas lejanas del esperado acuerdo entre ambas. Un enfoque positivo también puede llevar a mejorar las relaciones políticas. Nada se pierde considerando seriamente la oferta de Medvedev.
Financial Times