Cantabria abonará más de 6 millones en ayudas a 198 ganaderos para primera instalación y mejora de explotaciones
Se trata de dos líneas de ayudas cofinanciadas del Programa de Desarrollo Rural que serán aprobadas mañana por el Consejo de Gobierno
El Consejo de Gobierno aprobará mañana jueves en su reunión semanal la concesión de ayudas cofinanciadas por valor de más de 6 millones de euros (6.063.998), destinadas a la primera instalación de agricultores jóvenes y la modernización de las explotaciones ganaderas que existen en la región, y de las que se verán beneficiados 198 ganaderos.
Del total del montante, que se aplicará durante los próximos 5 años, 2,7 millones de euros se repartirán entre 61 ganaderos que han solicitado ayuda para su primera instalación agraria. Y para la modernización de explotaciones ganaderas, la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente destina 3,4 millones, que se repartirán entre 137 ganaderos.
Estas dos líneas de subvenciones, que corresponden a la convocatoria de 2019, forman parte del Programa de Desarrollo Rural de Cantabria, integrado por fondos propios del Gobierno regional, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y el programa europeo FEADER.
En el caso de las subvenciones para la primera instalación de jóvenes agricultores, se trata de ayudas destinadas a favorecer la incorporación de jóvenes al sector agrario de Cantabria en calidad de titular, cotitular o socio de una explotación agraria. Los beneficiarios han de tener como máximo 40 años y pueden recibir un máximo de 44.000 euros para iniciar su actividad agraria.
Por su parte, las ayudas para las inversiones en explotaciones agrarias mediante planes de mejora están destinadas a apoyar las inversiones materiales o inmateriales que mejoren el rendimiento global de la explotación agrícola, pudiendo llegar a alcanzar hasta un 60% de la inversión subvencionable.
El consejero Guillermo Blanco ha destacado la importancia de estas ayudas para impulsar el desarrollo de las zonas rurales con actuaciones encaminadas al rejuvenecimiento del sector agrario, la renovación de las estructuras y explotaciones agrarias, el fomento de la competitividad de los ganaderos y la colaboración en la protección del medio ambiente.
Asimismo, ha subrayado el esfuerzo que están realizando los técnicos de la Dirección General de Desarrollo Rural para que los efectos de la pandemia del coronavirus afecten lo menos posible a la tramitación de un tipo de ayudas que, en su opinión, «son fundamentales» para que los agricultores y ganaderos de la región se adapten a los retos que entraña el cambio climático, posicionen al producto en la cadena de valor, puedan innovar e implementar nuevos sistemas de producción adaptados a las exigencias climáticas.
«No me voy a cansar de decirlo. Estamos aquí para ayudar al sector primario dentro de nuestras posibilidades y lo vamos a seguir haciendo, a pesar de las dificultades que nos estamos encontrando todos como consecuencia del COVID-19», ha insistido el consejero.
En su opinión, «es de justicia que les apoyemos ahora más que nunca después de haber demostrado durante la vigencia del estado de alarma que el sector primario es clave para el desarrollo económico de la región y, sobre todo, para abastecer a la población de alimentos y dinamizar nuestras zonas rurales».
De igual manera, ha reivindicado un mayor apoyo por parte de la Unión Europea a través de los fondos que destina al Programa de Desarrollo Rural, tanto los correspondientes a la actual etapa de transición como los de recuperación, con el fin de «seguir manteniendo intensidades similares de apoyo al sector primario en los próximos años».
«Nuestros agricultores y ganaderos siguen requiriendo el mismo apoyo a esa renta agraria que no mejora, por lo que debemos seguir trabajando para tratar de mantener esos apoyos, facilitando todas las herramientas que los reglamentos comunitarios nos permitan», ha indicado Blanco.