Cantabria pierde 63,6 millones por el recorte del poder adquisitivo de sus pensionistas
Cantabria «se empobrece» en 63,6 millones por la pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas, según ha señalado el sindicato USO, que ha indicado que, de media, cada jubilado ha perdido 713 euros en 2021, cifra que como ha alertado puede aumentar durante este año.
En un comunicado, la Unión Sindical Obrera sostiene que los 89.307 jubilados cántabros receptores de pensiones contributivas han sufrido un ‘recorte’ del 4 por ciento durante el pasado ejercicio.
Explica en este sentido que las pensiones contributivas se incrementaron un 0,9% a principios de año, porcentaje que el Gobierno central estimó como «horizonte inflacionario» para todo el ejercicio.
Pero según USO, una vez comprobada la inflación real y aplicado el nuevo criterio de «inflación media», que el Ejecutivo valoró en el 2,5%, se procedió a incrementar la pensión con un 1,6% adicional a través de la llamada «paguilla» recibida este mes de enero.
Todo ello sumado hace que la revalorización de las pensiones quede en el 2,5%. Y como el IPC general durante el año 2021 se incrementó en un 6,5%, el diferencial entre la subida de las pensiones y la inflación general ha supuesto la pérdida del 4% para cada jubilado, según los cálculos de USO.
En Cantabria, con una pensión media contributiva actual de 1.273 euros al mes -17.822 euros anuales-, la pérdida media al aplicar un 4% a las 14 pagas que reciben los pensionistas suponen 713 euros al año por cada uno.
Como consecuencia, prosigue el sindicato, el impacto en la región de la pérdida de poder adquisitivo de los jubilados se eleva a 63.675.891 euros y, por consiguiente, la reducción de riqueza de la comunidad autónoma.
En este sentido, apunta que el peso en la economía de la llamada ‘tercera edad’ aumenta cada año por el progresivo envejecimiento de su población.
«El Gobierno central, con su reforma de las pensiones para el año 2022, ha cambiado la fórmula de incremento de las pensiones bajo el subterfugio de la aplicación del ‘IPC medio’ en vez del ‘IPC general'», se queja la formación sindical, que añade que este 2022 las pensiones contributivas se han incrementado un 2,5% y a final de año ya no habrá revisión con «la famosa paguilla» si hay desviación de la inflación.
«Si durante el presente ejercicio la inflación se eleva en los términos previstos por instituciones y gabinetes independientes, que la sitúan en el entorno del 5%, esto hará sumar más pérdidas de poder adquisitivo y, por tanto, empobrecimiento de los pensionistas», sostiene USO, para quien las pensiones «tienen que dejar de ser mercancía electoral de los partidos y del llamado diálogo social».
«La pensión no es un regalo del Gobierno, es un derecho ganado con el trabajo y la cotización», sentencia.