Dos hombres aceptan 15 años por abusar del nieto de uno, tener relaciones ante él y sacar fotos
Los dos hombres acusados de exhibirse ante el nieto de uno de ellos, de tres años, abusar de él y tomarle fotografías han reconocido los hechos y han aceptado una pena de 15 años de cárcel para cada uno de ellos en el juicio contra ambos, celebrado este martes en la Audiencia Provincial de Cantabria.
En la vista, desarrollada en la Sección Tercera con conformidad de las partes y a puerta cerrada para asegurar la protección del menor, también se ha impuesto a los procesados una indemnización conjunta de 50.000 euros al pequeño por los daños morales causados.
Los dos llevan cerca de un año en prisión por estos hechos, y en el ejercicio al derecho a la última palabra uno de ellos -pareja del abuelo de la víctima- ha pedido perdón y ha mostrado arrepentimiento por lo sucedido, han informado fuentes jurídicas a esta agencia.
Ambos han sido condenados por un delito de abuso sexual (hacer una felación al pequeño) a diez años de prisión cada uno y a no acercarse a menos de 500 metros al niño, a su domicilio o lugar de estudios ni a comunicarse con él por cualquier medio durante quince años.
Y a cinco años más de cárcel por un delito de corrupción de menores (pornografía infantil, por tomar al menos cuatro imágenes del hecho anterior), con la medida accesoria de no acercarse a menos de 500 metros ni comunicarse con la víctima durante siete años más.
Además, se les ha impuesto libertad vigilada durante diez años una vez salgan de prisión, así como inhabilitación para profesión, oficio o actividades, retribuidas o no, que conlleven contacto regular y directo con menores durante 25 años.
Y por el delito de exhibicionismo continuado (por mantener relaciones sexuales ante el pequeño) les ha recaído una multa de 2.160 euros, a razón de una cuota diaria de 4 euros durante 18 meses, ha informado a Ep fuentes personadas.
La Fiscalía pedía inicialmente 20 años de prisión a cada uno de ellos y 28 de alejamiento y prohibición de comunicar con el menor, libertad vigilada durante diez e inhabilitación especial durante 16, además de los 50.000 euros en concepto de responsabilidad civil.
Por su parte, la defensa del abuelo del menor manifestaba que padece demencia senil y que «tiene alterada y afectada su percepción de la realidad», por lo que «no comprende la ilicitud de los hechos que se le imputan» que «ni tan siquiera es consciente ni recuerda».