El acceso al Faro del Caballo se controlará en verano a partir de 2022
Los accesos al Faro del Caballo, en Santoña, se controlarán durante los meses de verano a partir del próximo año 2022, para evitar «aglomeraciones» que ya se producían en este enclave y que con la pandemia se ha convertido en un referente turístico «de primer orden».
Además, se baraja el cobro por acudir al lugar, -«algo simbólico» y de lo que estarían exentos los vecinos de la villa- para «soportar los costes» de la plataforma para regular la entrada y como «compromiso» para que quien reserve, acuda al lugar.
Lo ha avanzado este jueves, a preguntas de los periodistas, el alcalde de la villa, Sergio Abascal, quien ha recordado que el Ayuntamiento no tiene competencias sobre este lugar.
Y es que aunque pertenece al municipio, se ubica en el Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, que depende del Gobierno de Cantabria, mientras que el faro en sí pertenece a Puertos del Estado y también tiene implicaciones Costas.
No obstante, el Consistorio ha intentado regular el acceso a este faro, porque aunque están «encantados» con la afluencia de visitantes, «no tanto» en un año de pandemia en el que Santoña lo ha pasado «muy mal», con momentos «muy complicados». «Se ha convertido en un boom turístico y hay prácticamente romerías para acceder al faro durante todo el verano», ha señalado el regidor.
Debido a la implicación de diferentes administraciones, la municipal se ha reunido con las demás para intentar canalizar ese control, que solo se llevaría acabo en los meses de verano -julio, agosto y parte de septiembre- no durante todo el año. Sería algo «similar» a lo que se hace en las Playas de las Catedrales, en Lugo, las islas Cíes, en Pontevedra, o San Juan de Gaztelugatxe, en Bermeo, ha comparado Abascal.
El Ayuntamiento se ha reunido ya con la Autoridad Portuaria de Santander y su presidente, Francisco Martín, que ha planteado la posibilidad de formalizar un convenio de cesión del faro para que el Consistorio tenga una «mínima competencia» sobre él e intentar así gestionar el acceso.
Tras esto, el alcalde se va a entrevistar con el consejero de Turismo, Javier López Marcano, para buscar la forma de colaboración en ese control, que implicará cita previa, a través de una plataforma telemática que permita la reserva de entrada a un máximo de personas al día y en el periodo estival.
Y el cobro sopesado sería, según Abascal, algo «simbólico», de un euro por ejemplo, para soportar los costes de la plataforma y como «compromiso» para que quien reserve, acuda. A su juicio, esa cuantía no será un «obstáculo» para los visitantes de otros municipios o comunidades, y los santoñeses seguirán teniendo acceso libre.
El alcalde de Santoña confía en «despejar» el camino para solucionar el problema de las «aglomeraciones» en un entorno «muy limitado», en un espacio en que confluyen varias administraciones además.
De todos modos, teniendo en cuenta los trámites y plazos administrativos, ha dicho que es «imposible» que el control de accesos esté operativo este verano, pero podría estarlo el próximo.
Abascal ha respondido así a preguntas de los medios en una rueda de prensa en la que ha presentado una feria de pesca que se celebrará en Santoña.