El equipo de Diego Botín hace historia y gana en San Francisco la cuarta temporada de SailGP
La copa reporta dos millones de dólares
El 14 de julio de 2024 siempre será recordado en el deporte español. Primero, Carlos Alcaraz conquistó su segundo Wimbledon. Después, la selección española de fútbol conquistó ante Inglaterra su cuarta Eurocopa. Y, el equipo español de SailGP remató la jornada haciendo historia y proclamándose campeón de la cuarta temporada de SailGP. Remontó para entrar en la Gran Final y, en ella, ganó a dos de las potencias más importantes del mundo de la vela como son Australia, campeón de las tres temporadas anteriores, y Nueva Zelanda. En un año, el equipo que lidera Diego Botin ha pasado de acabar último la temporada, a ser los reyes de la Fórmula 1 del mar. Impresionante.
“La temporada pasada fuimos últimos y ahora nos hemos proclamado campeones, es increíble. Es un fin de semana histórico para el deporte español, habiendo ganado Wimbledon, la Eurocopa y la temporada 4 de SailGP”, reconoció Diego Botin tras la gesta.
“La temporada pasada fuimos últimos y ahora nos hemos proclamado campeones, es increíble
Diego Botin, piloto del equipo español de SailGP
España llegó al Gran Premio de San Francisco, el número 13 de la temporada, en tercera posición en la general. Los tres primeros disputarían la Gran Final después de celebrarse las cinco últimas regatas de flota en un campo de regatas mítico como el de la ciudad estadounidense. España partía con una ventaja de cinco puntos respecto a Francia, a quien había que vigilar para que no le arrebatase la tercera plaza.
Obligados a remontar
El sábado, sin embargo, tras disputarse las tres primeras carreras de flota, Francia se colocó líder mientras España era séptima. Pero si algo ha aprendido el equipo español este año, gracias entre otras muchas cosas al trabajo de team building que ha hecho, ha sido a confiar en ellos mismos.
En la cuarta carrera España y Francia protagonizaron una batalla estratégica que terminó con los galos fuera de la pugna por el campeonato. Ayer era la Fiesta Nacional de Francia pero acabó siendo la fiesta nacional del deporte español. El F50 de Quentin Delapierre, que ya estuvo cerca de volcar en la penúltima marca de la manga, rompió el timón al chocar contra Dinamarca en la boya previa a meta. Fueron penalizados en la clasificación del campeonato, además de no poder competir en la última carrera de flota. Ya lo había advertido a MARCA Florian Trittel, trimmer de ala, en la previa. Estaba convencido que el piloto galo se sobreexcitaría en algún momento y ellos estarían preparados para aprovecharlo, como realmente pasó.
En la quinta regata, el equipo español de SailGP buscaba asegurar su puesto en la Gran Final de la competición y se impuso a las favoritas: Nueva Zelanda y Australia. La clave, al igual que sucedió en el Gran Premio de Bermudas, fue una salida inmejorable y una navegación para la historia. Lideró la prueba de principio a fin aguantando bien la presión y este año fue a ellos a quienes les llevaron el barco a puerto y se lo recogieron. Los de Tom Slingsby fueron segundos y los de Peter Burling, terceros.
Seguro que este resultado supone un empujón definitivo para que España logre un patrocinador que les permita autofinanciarse de cara a la temporada que viene, que comenzará el 23 de noviembre en Dubai. España cierra una temporada en la que también se había proclamado campeona en Los Angeles y Bermudas, fue segunda en Abu Dabi y tercera en Saint Tropez.
Diego Botin, Florian Trittel, Joel Rodríguez, Nicole van der Velden, Joan Cardona, Bernardo Freitas y Steward Dodson han hecho historia y esperan que sea la semilla para hacer seguir creciendo la vela española a nivel mundial.
Botin y Trittel no tendrán mucho tiempo para celebraciones. De San Francisco partirán a Marsella para terminar de preparar los Juegos Olímpicos de París, que comienzan el 26 de agosto y en los que aspiran a proclamarse campeones olímpicos de 49er y poner el broche de oro a una temporada de ensueño.