El reparto de los 55 millones para pymes y autónomos beneficiará a 95 sectores
Cantabria ya ha recibido los 55 millones de euros concedidos por el Gobierno de la nación para ayudas directas a empresas y autónomos y está a punto de publicar la regulación que ordenará el reparto. Ya se sabe que amparará a 95 sectores productivos que han sido afectados por la pandemia, serán proporcionales a las pérdidas de facturación y se deberán utilizar para pagar deudas contraídas desde marzo de 2020.
Cantabria ha recibido ya del Gobierno de España los más de 55,4 millones de euros que deberán destinarse para ayudas directas a empresas y autónomos de la comunidad, unos fondos de cuya distribución se encargará la Consejería de Innovación, Industria, Transporte y Comercio, que será la que publique la convocatoria. Serán beneficiarios los 95 sectores económicos establecidos por el Ejecutivo central y también el ocio nocturno.
Así lo ha anunciado el vicepresidente regional, Pablo Zuloaga, que ha señalado que después de que el Gobierno central haya “cumplido con Cantabria” al transferir ese dinero, el Consejo de Gobierno trabaja en los decretos que den salida a esta financiación.
Este dinero llegará a los sectores más afectados por las limitaciones impuestas por la pandemia del Covid, un apoyo que se sumará a los ‘cheques resistencia’ tramitados y repartidos por la comunidad autónoma en los últimos meses con este mismo fin.
Zuloaga ha explicado que, a diferencia de estos ‘cheques resistencia’, que se gestionaron desde Sodercan y la Sociedad Regional de Cultura y Deporte, en este caso no serán las empresas públicas las que coordinen estas ayudas -ya que el decreto del Gobierno central lo impide- sino que será directamente la Consejería de Industria la que lo haga, porque es a la que corresponden la mayoría de los 95 CENAES establecidos en el decreto, a los que Cantabria incorporará, por mandato parlamentario, el ocio nocturno, cerrado desde hace muchos meses.
Los posibles requisitos
A falta de conocer los términos concretos del decreto cántabro que deberá regular estas ayudas directas, la filosofía establecida por el Ministerio de Economía hace presumir que variarán en función del tipo de empresa, de manera que los autónomos que cotizan en el régimen de estimación objetiva en el IPRF podrán optar a una cantidad fija de 3.000 euros, mientras que el resto de autónomos y empresas podrán solicitar un rango de entre 4.000 y 200.000 euros.
En cualquier caso, el importe de las ayudas ascenderá a un máximo del 40% de la caída adicional de ingresos sufrida por la pandemia para micropymes y autónomos, mientras que ese porcentaje se reduce al 20% en el caso del resto de empresas.
Las ayudas tienen carácter finalista, de manera que se tienen que utilizar para pagar las deudas contraídas desde marzo de 2020, como pago a proveedores, suministros, salarios, arrendamientos o deuda financiera. La concesión de las ayudas estará ligada al mantenimiento de la actividad hasta junio de 2022, así como a otros requisitos, incluyendo la prohibición de reparto de dividendos y aumento de retribuciones del personal directivo. Las empresas también deberán estar al día del pago de obligaciones tributarias y no operar en paraísos fiscales.
Los criterios de actuación fijados por el Ministerio son idénticos a los utilizados para el React-EU: impacto de la pandemia en la riqueza de la comunidades autónomas, impacto de la crisis en el desempleo e impacto en el desempleo juvenil. Unidas Podemos reclamaba que las ayudas se entregaran directamente desde el Gobierno sin pasar por las autonomías, pero finalmente se ha optado por un modelo mixto.
Las comunidades contaban ya con los 16.000 millones de euros transferidos por el Gobierno con el llamado Fondo Covid-19 y más 8.000 millones del fondo europeo React-UE. Además, las regiones ya anticiparon que destinarían un 25% o 2.000 millones a ayudar al tejido productivo.
10,9 millones para transformar el sistema de cuidados
El Consejo Territorial de Servicios Sociales ha aprobado la distribución territorial de los 730,8 millones de euros que las comunidades autónomas deben destinar a financiar los proyectos en cuidados de larga duración, servicios sociales y accesibilidad universal.
La delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, ha señalado que «con estos nuevos fondos, no solo se prestará una mejor atención a los cántabros sino que se contribuirán a generar empleo de calidad en el sector para dar atención y respuesta a las necesidades de la población».
De los fondos gestionados por las comunidades autónomas en su territorio, al menos un 15% debe destinarse a proyectos en los que intervengan las entidades locales. El Ministerio, a su vez, llevará a cabo proyectos conjuntos con la FEMP, por un valor de 40 millones de euros.
Modernización de la FP
Cantabria recibirá 5,44 millones de euros para el impulso del Plan de Modernización de la Formación Profesional que está desarrollando el Ministerio de Educación, procedentes del Mecanismo de Recuperación, Transformación y Resiliencia (MRR).
Entre los objetivos a los que van destinados estos fondos destaca el desarrollo del nuevo sistema de evaluación y acreditación permanente de competencias básicas y profesionales. La previsión es acreditar este año las competencias de alrededor de 450.000 trabajadores en toda España y llegar a tres millones en 2023.
Actualmente, el 48% de la población activa carece de acreditación profesional, a pesar de desempeñar su actividad laboral a diario, lo que dificulta su acceso a mejores empleos y mejores condiciones laborales.
Además, el acuerdo recoge fondos destinados a la conversión de ciclos de grado medio y grado superior en bilingües. Para el presente ejercicio económico, prevé la formación de unos 20.700 alumnos en ciclos bilingües, con una inversión total de 93 millones de euros.
También se redimensionará la oferta formativa de Formación Profesional, con la creación de 38.789 plazas el próximo curso, para alcanzar en un plazo de tres años 135.000, que se sumarán a las más de 60.000 plazas creadas el curso pasado.
Cuatro razones por las que las pymes vamos a recibir ayudas de los Fondos Europeos
Mas del 99% del sector empresarial de Cantabria está conformado por pymes, es decir, micro, pequeñas y medianas empresas, incluyendo autónomos y empresas familiares, de acuerdo con datos del Directorio Empresarial del ICANE.
Y este sector empresarial es el que se enfrenta a los retos más importantes para asegurar su supervivencia y crecimiento en los tres próximos años, y con ello el bienestar de la economía de Cantabria, puesto que somos el verdadero corazón que mantiene la economía de la región y estamos comprometidos con el logro de los cuatro ejes que marcan como prioridad los fondos europeos:
1. La transición ecológica y hacia modelos de economía circular
2.- la transformación digital de nuestras empresas, así como
3.- el fomento de la cohesión social y territorial y
4.- la igualdad de género en todas nuestras actuaciones
Son estas cuatro razones por las que las micro, pequeñas y medianas empresas, los negocios familiares y los autónomos debemos ser el sector que reciba el mayor porcentaje de los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia que han empezado a llegar de Europa a través del conocido como NextGenerationEU.
Como ejemplo, y sólo por mencionar una de las muchas ayudas disponibles, el Plan de Digitalización de Pymes 2021-2025 debe servir de soporte para que todas y cada una de las empresas y autónomos de Cantabria logren con éxito la transición digital que les permita implantar un modelo de negocio más eficiente, competitivo, innovador y resiliente.
Socio director de Glezco
La nueva división de Innovación y Transformación Digital de Glezco Asesores y Consultores está al tanto de esta y muchas otras fuentes de financiación, enfocadas en el impulso y fortalecimiento de las pymes a través de la innovación y la digitalización.
Además, contamos con profesionales en el sector empresarial que le guiarán desde el diagnóstico y análisis de su empresa y el mercado, la búsqueda de fondos y ayudas a las que puede acceder, así como todo el proceso necesario para aplicar a dichas fuentes de financiación y sacarle la máxima rentabilidad.
