El restaurante La Torre by Marañón de Galizano, finalista al I Premio a la Sostenibilidad en Madrid Fusión
El restaurante cántabro de los hermanos Javier y Marcos Marañón Viadero, La Torre by Marañón de Galizano, ha sido designado finalista al I Premio a la Sostenibilidad en el certamen que se celebrará dentro de la feria de gastronómica Madrid Fusión.
El premio, promovido por la empresa Aquanaria, busca destacar al restaurante que tenga la sostenibilidad como filosofía, teniendo en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030, ha explicado el finalista cántabro.
El restaurante La Torre es pionero en utilizar la ultima tecnología en ahorro y eficiencia energética como la geotermia para grandes superficies, el ahorro y depurado de aguas, además de disponer de huerto y ganadería propia para realizar una cocina de chef productor, ‘de su finca a la mesa’, con el fin de intentar mejorar con su trabajo la sostenibilidad, el medio ambiente y el respeto a la naturaleza sin olvidar el producto autóctono de Cantabria.
La final tendrá lugar el 1 de junio, en la que el restaurante cántabro competirá con K&Co Sustainable Kitchen Bar (Madrid), Premio Nacional de Hostelería apartado Sostenibilidad 2019; restaurante Miguel González (Pereiro de Aguiar, Ourense), con una Estrella Michelin y un Sol Repsol; restaurante Azurmendi (Larrabetzu, Vizcaya), con tres Soles Repsol, tres Estrellas Michelín y una verde al Mejor Restaurante Sostenible del Mundo 2018; y restaurante Quitu (Quito, Ecuador), considerado uno de los mejores restaurantes sostenibles de América.
El jurado, formado por periodistas especializados y cocineros de prestigio, así como por especialistas gastronómicos y del sector alimentario, proclamará un ganador único del premio en el escenario de Madrid Fusión Alimentos de España.
El premio está dotado de una escultura de metal reciclado hecha por Mikel Aranburu, ‘El artista de los peces’, y un premio en metálico de 4.000 euros. En caso de ganar, los hermanos Marañón donarán esta cantidad a una ONG local que los destinará a la protección de la costa en las playas de Ribamontán al Mar, entorno en el que se encuentra el restaurante que destaca en su carta los pescados como materia prima imprescindible en la gastronomía de esta zona de Cantabria.