El Rey se aleja de su padre: «Los principios éticos obligan a todos y están por encima de consideraciones familiares»
Reivindica el "espíritu renovador" de su reinado en un mensaje centrado en pedir "un gran esfuerzo nacional" para superar la pandemia
El Rey Felipe VI ha incluido este jueves en su mensaje de Navidad unas breves palabras para reivindicar el carácter «renovador» de su reinado y marcar distancias con su padre, el Rey Juan Carlos. «Los principios morales y éticos» que reclaman los ciudadanos, ha subrayado, «obligan a todos sin excepciones» y «están por encima de cualquier consideración, de la naturaleza que sea, incluso de las personales y familiares».
«Así lo he entendido siempre, en coherencia con mis convicciones, con la forma de entender mis responsabilidades como jefe del Estado y con el espíritu renovador que inspira mi reinado desde el primer día», ha señalado en sus tradicionales palabras a los españoles.
En un momento en que el Gobierno esperaba del Rey un mensaje «a la altura» de las circunstancias y Unidas Podemos llegó a reclamar incluso una condena expresa de las actividades privadas del Rey ‘emérito’, Felipe VI ha dicho que a estos principios éticos ya se refirió en su proclamación en 2014.
Aunque sus palabras han estado muy centradas en la pandemia de coronavirus que ha sacudido el país en 2020, Felipe VI ha aludido así, sin mencionarla expresamente, a la situación de su padre justo después de hacer un llamamiento a «preservar los valores éticos» de la sociedad y también los «principios democráticos» y «el cumplimiento de las leyes».
De hecho, ha subrayado que, en estos tiempos de «incertidumbre», la Constitución española es garantía del modo en que los españoles entienden la vida, «la sociedad y el ser humano» y «su dignidad, sus derechos y libertades».
LA CONSTITUCIÓN, ÉXITO Y FUNDAMENTO DE LA CONVIVENCIA
«Una Constitución que todos tenemos el deber de respetar y que en nuestros días es el fundamento de nuestra convivencia social y política», ha incidido, añadiendo que la Carta Magna es «un éxito de y para la convivencia en libertad».
En esa línea y, como ha hecho en otros mensajes navideños, ha pedido a los españoles que no olviden que el progreso conseguido en democracia es «resultado del encuentro y el pacto entre los españoles después de un largo periodo de enfrentamientos y divisiones».
Resultado, ha proseguido, de «querer mirar juntos hacia el futuro», unidos «en los valores democráticos» y en un «espíritu integrador» que respete «la pluralidad y las diferencias» con «capacidad de dialogar y alcanzar acuerdos». A su juicio, esos principios «no pierden nunca vigencia por el paso de los años».
«NI EL VIRUS NI LA CRISIS NOS VAN A DOBLEGAR»
Es más, ha defendido que el «modelo de convivencia democrática» es una de las fortalezas en las que apoyarse para hacer frente a la grave situación creada por la pandemia. Los españoles, ha recalcado, han superado otras «dificultades también graves» en las últimas décadas, y esta no será distinta: «ni el virus ni la crisis económica nos van a doblegar».
El jefe del Estado ha comenzado su mensaje con unas palabras para las familias que no han podido reunirse por las restricciones sanitarias y con un recuerdo «con emoción y con todo respeto» por los fallecidos, que han dejado «en miles de hogares un vacío imposible de llenar».
MANTENER LA RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL
También con palabras de ánimo para quienes luchan contra la enfermedad o sus secuelas. Además, ha hecho un llamamiento a mantener «la responsabilidad individual» como «instrumento efectivo de lucha contra el virus» mientras llegan las vacunas y los tratamientos.
Así, ha reconocido que 2020 ha sido «muy duro y difícil», con un virus que ha traído «sufrimiento, tristeza y temor» y que ha dejado en muchas familias «la angustia del desempleo o la precaridad», de no poder «cubrir las necesidades básicas» o de tener que abandonar negocios tras toda una vida de dedicación.
Sin embargo, ha proclamado que la respuesta «no puede venir de más desánimo o más desconfianza», sino de «afrontar el futuro con determinación y seguridad», con confianza en el país, en el modelo de convivencia, «con esfuerzo, unión y solidaridad».
«LA REINA Y YO HEMOS SENTIDO EL PULSO DE NUESTRA SOCIEDAD»
El Rey ha llamado a un «gran esfuerzo nacional» para el que, a su modo de ver, «lo más importante» son las personas, los miles de ciudadanos que han trabajado por los demás «con abnegación, compromiso y solidaridad».
De hecho, ha señalado que eso han podido comprobarlo personalmente la Reina y él, que en estos meses de pandemia han recorrido distintos lugares de España. «En el campo y en la mar, en los pueblos y en las ciudades, en los mercados, en las fábricas, hemos visto el coraje y el nervio de este país. Hemos sentido el pulso de nuestra sociedad que, pese a todos, ha mantenido a España en pie», ha dicho.
Con sus palabras, el Rey ha querido rendir homenaje a los trabajadores sanitarios, por su «extraordinaria profesionalidad y gran humanidad», ha destacado la labor de las «organizaciones solidarias» y ha puesto de manifiesto que la pandemia ha mostrado «una sociedad más unida que nunca en su lucha».
«Contamos, por tanto, con una sociedad fuerte y un Estado sólido», ha dicho recordando como los servicios públicos y básicos, y las actividades esenciales se han mantenido en pie. La pandemia, ha señalado, «ha revelado aspectos que necesitan ser mejorados y reforzados», pero también las «fortalezas como Estado avanzado», como han demostrado las Fuerzas Armadas, los Cuerpos de Seguridad, Protección Civil y Emergencias y otros servidores públicos.
«CADA PERSONA IMPORTA, Y MUCHO»
Ahora, a su entender, es momento de combatir la crisis económica y «evitar, sobre todo, que derive en una crisis social». «Cada persona importa, y mucho», ha apuntado, y por eso ha pedido tener en mente a personas y familias, y sobre todo a los jóvenes, que «no pueden ser los perdedores» y deben poder llevar a cabo sus proyectos de vida. «España no puede permitirse una generación perdida», ha remachado.
Para el Rey, «proteger a los más vulnerables y luchar contra las desigualdades que la pandemia ha creado o agravado es cuestión de dignidad» y también será fundamental recuperar la economía, fortaleciendo el tejido empresarial, industrial y de servicios, apoyando a empresas y autónomos para crear «ese empleo que tanto necesita» el país. En ese punto ha reivindicado la «oportunidad histórica» que brinda la UE.
Felipe VI ha reivindicado España como «un país extraordinario, de una enorme riqueza y diversidad cultural» construido a lo largo de siglos con «el esfuerzo de muchas generaciones de españoles» y ha proclamado que el español no es «un pueblo que se rinda o se resigne en los malos tiempos».
Consciente de que «no va a ser fácil» superar la actual situación, ha querido lanzar el mensaje de que «con esfuerzo, unión y solidaridad, España saldrá adelante». «Con todos y para todos. Y, como Rey, yo estaré con todos y para todos, no solo porque es mi deber y mi convicción sino también porque es mi compromiso con todos vosotros, con España».
El jefe de Estado ha terminado su mensaje apuntando que «no será difícil que el año 2021 mejore a este 2020», con la expectativa de «recuperar en lo posible la normalidad» y con unas palabras para agradecer «muy sinceramente todas las muestras de afecto y apoyo» recibidas en este año de parte también de su esposa y sus hijas.