Fuerte sanción para la filial cántabra de ALSA y otras empresas de transporte por prácticas anti-competencia
Un dictamen que llega tras la denuncia interpuesta en 2019 por la Federación Cántabra del Taxi, contra las prácticas irregulares en las licitaciones para las rutas de transporte escolar, por parte de diversas empresas de transporte en la región.
Gracias a las pruebas e indicios aportados por los denunciantes, la CNMC pudo verificar que estas empresas adoptaban varias estrategias para eliminar la competencia en las licitaciones de muchas rutas de transporte escolar, como el establecimiento de pactos de no competencia entre ellas para no concurrir a las mismas licitaciones; también alcanzaron acuerdos para ofrecer coberturas, en procedimientos negociados sin publicidad alguna, que aseguraban la adjudicación de la licitación a la empresa que solicitaba la cobertura.
Además, “ha quedado acreditado el uso ilícito de la figura de la Unión Temporal de Empresas para concurrir conjuntamente a un gran número de licitaciones, con el objetivo de no tener que competir entre ellas” comenta Ángel Sánchez y Resina, director de AESYR & Abogados, despacho que interpuso la denuncia en nombre del colectivo de los taxistas.
Infracción única y continuada
Tras comprobar que dichas empresas mantuvieron estas prácticas para repartirse una gran cantidad de rutas de transporte escolar entre los cursos escolares 2011/2012 y 2018/2019, la CNMC considera que constituyen una infracción única y continuada del artículo 1 de la Ley de Defensa de Competencia (LDC), constitutiva de cártel, imponiéndoles fuertes sanciones económicas que, en total, ascienden a más de 700.000 euros.
La de mayor cuantía, es la aplicada a la filial cántabra de ALSA, Transportes Terrestres Cántabros S.A. (también solidariamente a su matriz General Técnica Industrial, S.L., es decir, a la propia ALSA) que deberá abonar 615.391 euros.
El resto de empresas sancionadas son: Anfersa Adaptado, con 25.913€; Autobuses Benito, con 36.296€; Autocares Mariano, con 20.000€; y Zorrilla e Hijo, con 10.465€.
También en otros mercados
Además, “la información recabada durante las inspecciones realizadas a raíz de esta investigación que impulsamos, puso de manifiesto que algunas de estas empresas también establecieron acuerdos de reparto de mercado y de no competencia en el transporte discrecional de viajeros” prosigue Sánchez y Resina.
La CNMC también ha acreditado que, en este mercado, las empresas Benito y Turytrans establecieron acuerdos anticompetitivos para repartirse los servicios de transporte discrecional de viajeros con origen en Cantabria.
La comisión considera probado estos hechos en, al menos,15 contratos entre los años 2013 y 2019, imponiéndoles por esta segunda infracción, nuevas sanciones que alcanzan los 263.739€ en el caso de Turytrans (ALSA), y los 13.960€ para Autobuses Benito.