Fundación Camino Lebaniego lidera un proyecto internacional para impulsar el turismo rural
La Fundación Camino Lebaniego lidera un proyecto de cooperación transnacional en el que participan otras ocho entidades de España, Francia y Portugal y que tiene como objetivo principal la reactivación del turismo de interior en los territorios rurales tomando como eje los caminos de peregrinación.
La iniciativa, denominada ‘ULTREIA-Sudoe’, se desarrolla dentro del programa europeo Interreg Sudoe, que financia en un 75% el presupuesto de la iniciativa, de 1,4 millones de euros en total.
La directora de la Fundación Camino Lebaniego –adscrita a la Consejería de Turismo–, Pilar Gómez Bahamonde, ha dedstacado que se trata de un «proyecto ambicioso y con calado internacional para continuar divulgando nuestro patrimonio cultural y religioso».
Por otro lado, ha elogiado a todas las entidades que trabajarán en ULTREIA-Sudoe porque son «referentes cada una en su sector» y ha confiado en que «entre todas ellas alcanzaremos los objetivos señalados».
Entre ellas están la Asociación de Municipios del Camino de Santiago Francés, Amica, la Fundación Santa María la Real o la Sociedad de Gestión del Plan Jacobeo. Además, completan el consorcio otros tres socios de Francia y Portugal: Agence française des chemins de Compostelle, Município de Vila Pouca de Aguiar y Universidade NOVA de Lisboa.
ULTREIA-Sudoe pretende reactivar el turismo interior con el Camino de Santiago y el Camino Lebaniego como ejes de las actuaciones, para potenciar y dinamizar los territorios por los que transcurre, especialmente los núcleos rurales en riesgo de despoblamiento. En esta línea, se ha elegido como nombre la locución latina Ultreia, documentada como saludo entre peregrinos y que podría traducirse como «Vamos más allá» o «Vamos adelante».
ARTESANÍA Y TRADICIONES
Para lograr su objetivo el consorcio trabajará fundamentalmente en el conocimiento y la puesta en valor de los recursos naturales y culturales, sobre todo tradiciones agroalimentarias y artesanía, vinculadas a los Caminos a Santiago y al Camino Lebaniego.
La meta es trazar una estrategia que pueda ser compartida por todos los Caminos del ámbito Sudoe de Europa Suroccidental. Para lograrlo se abordarán varios aspectos, como la identificación de los recursos materiales e inmateriales, así como la capacidad productiva artesanal, creativa y agroalimentaria.
Una vez identificado el potencial de los Caminos en este ámbito, el siguiente paso será poder acercarlo a turistas, peregrinos y población del territorio.
Otro de los retos es lograr que cada acción se lleve a cabo siempre desde el «respeto, la conciencia, la autenticidad, la sostenibilidad y el compromiso con los valores esenciales del Camino», ha señalado la Fundación en nota de prensa.
Para poner en marcha cada una de las acciones se crearán grupos de trabajo específicos que permitan, además, mantener el trabajo, una vez que el proyecto finalice en 2026.