Cantabria podría recibir 62 millones de los ‘Next Generation’ para políticas de vivienda

El Gobierno de Cantabria estima que la comunidad podría recibir en tres años (2021, 2022 y 2023) casi 62 millones de los fondos ‘Next Generation’ para la rehabilitación de viviendas y mejora de la eficiencia energética, unas ayudas con una «cantidad inédita» que el Ejecutivo y los agentes del sector se han comprometido a promocionar para que finalmente todo ese dinero se pueda invertir en la comunidad autónoma.

Con ese objetivo, el Ejecutivo, la Asociación de Promotores y Constructores y los colegios de Arquitectos (COACAN), Aparejadores (COAATCAN) y Administradores de Fincas han acordado «aunar fuerzas» para hacer que la comunidad aproveche la «oportunidad» que suponen ese dinero.

Y como prueba de esta voluntad, la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Ana Belén Álvarez (PSOE), cuyo departamento ostenta las competencias de viviendas; y agentes del sector han firmado este martes lo que han denominado «Pacto por la Rehabilitación» en el que tanto el Ejecutivo como los agentes implicados en el sector se comprometen a promocionar las ayudas en materia de rehabilitación de vivienda y eficiencia energética.

El acto se ha celebrado en la entrada de la sede del Gobierno de Cantabria y, además de la consejera y los representantes de los asociaciones y colegios profesionales, también ha participado la directora general de Vivienda, Eugenia Gómez de Diego.

La consejera ha explicado que el Pacto por la Rehabilitación nace de la «oportunidad» que suponen esa «cantidad inédita y extraordinaria» de fondos que puede recibir Cantabria para políticas de vivienda pero también supone un «enorme desafío».

Así, ha reconocido que hay «cierto temor y dudas» de que la demanda no este «alineada» con tal cantidad de fondos. Y es que la mayor parte de esos más de 60 millones que Cantabria tiene, según el Gobierno, al «alcance de su mano» tendrán que ser canalizados, no a través de la ejecución directa de la Administración Pública, sino a través de la propia demanda de los ciudadanos. De ahí la importancia de promocionar estas ayudas.

El objetivo es impulsar obras de rehabilitación en el parque edificado de Cantabria, formado, según datos aportados por la consejera, por 366.000 viviendas, de las que un 30 por ciento, unas 125.000, se han construido antes de los años 80 cuando las «exigencias de calidad y eficiencia energética eran muchos menores que en la actualidad». De ellas, unas 6.300 viviendas en bloque datan de entre 1941-1960.

La consejera ha asegurado que el Gobierno, en colaboración con los agentes, se va a «volcar» para que estos fondos lleguen a la ciudadanía. Así, ha señalado que se recorrerán todos los municipios para explicar los «beneficios» de la rehabilitación y eficiencia energética, se harán campañas de difusión y jornadas técnicas. «Todos tenemos que ser a una en este viaje», ha dicho.

SIETE EJES DE AYUDAS
Los cerca de 62 millones que se estima que la comunidad podrá recibir del total de 4.450 millones que el Gobierno de España repartirá de estos fondos entre las comunidades se van a distribuir en siete líneas de actuación.

Una de ellas será la de rehabilitación a nivel de barrio que, además de las obras de rehabilitación en edificios y viviendas incluye la urbanización del entorno Y otra será la de actuaciones de rehabilitación a nivel de edificio, con ayudas directas a particulares y comunidades de propietarios para la rehabilitación centrada en la eficiencia energética.

Una tercera línea de ayudas estará destinada a la mejora de la eficiencia energética, subvencionando la renovación de determinados elementos constructivos, como las ventanas; otra irá dirigida a apoyar la propia redacción de los proyectos de rehabilitación para que las comunidades de propietarios puedan contar con un documento técnico que incluya un diagnóstico del edificio y un plan de actuaciones.

La comunidad también recibirá fondos para construir viviendas en alquiler social; habrá también un programa de rehabilitación energética específico para edificios existentes en municipios de menos de 5.000 habitantes y un programa de impulso a la rehabilitación de edificios públicos que, según el Gobierno, contará con 5,9 millones de euros.

Las primeras convocatorias saldrán antes de que termine este año. Cada seis meses, Cantabria deberá rendir cuenta del cumplimiento de una serie de hitos y objetivos relacionados con estas ayudas.

IMPACTO DE LAS AYUDAS EN LA REACTIVACIÓN ECONÓMICA Y EL EMPLEO
La consejera ha defendido que las obras de rehabilitación, renovación y regeneración urbana tienen un efecto directo en el medio ambiente e inciden en la mejora de la calidad de vida de la población y el confort de los hogares y también, según ha señalado es palanca de cambio y reactivación económica y creación de puestos de trabajo.

Así, ha señalado que si en Cantabria se logran movilizar esos casi 62 millones de euros, se crearán unos 2.400 puestos de trabajo con una aportación de 175,5 millones de euros al PIB de Cantabria.

En representación de los agentes del sector han suscrito el Pacto los presidentes del la Asociación de Constructores y Promotores, Gervasio Pinta; del Colegio de Arquitectos, Moisés Castro; del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Cantabria, Miguel Ángel de Berrazueta, y del Colegio de Administradores de Fincas de Cantabria, Alberto Ruiz-Capillas.

Todos ellos se han felicitado de formar parte del pacto y han expresado su disposición a colaborar en esta iniciativa para que ese dinero llegue a Cantabria y a sus ciudadanos y se gaste «pronto y bien» en actuaciones de rehabilitación.

La consejera ha agradecido a todos ellos su «apoyo» a este pacto «de futuro y transformador» y por haber tenido «desde el primer momento su mano tendida a colaborar y trabajar».