La Consejería de Educación interviene en el caso de acoso del IES Torres Quevedo
El consejero muestra el rechazo "total" hacia los hechos y ya ha contactado con la familia para ofrecer atención "absoluta"
La Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria ha activado el protocolo de acoso escolar por la agresión sufrida por un alumno con discapacidad motora en el IES Leonardo Torres Quevedo de Santander.
Entre las medidas preventivas del protocolo de acoso adoptadas se encuentran el acompañamiento del alumno a lo largo del día, dentro del marco de protección y seguridad: la supervisión del clima del aula evitando el contacto entre víctima y agresor; la colaboración familiar para informar sobre el estado emocional del alumno y los posibles incidentes y el apoyo individualizado para trabajar autoestima, bienestar emocional o relaciones interpersonales.
El centro, por su parte, ha abierto procedimiento disciplinario ordinario a los responsables de la agresión, que conllevan medidas cautelares y la expulsión de cinco días del IES a los menores implicados, el plazo máximo que permite la ley. Pero al iniciarse un procedimiento por vía penal, incoado por la familia, dicho expediente se ha detenido.
El consejero de Educación, Formación Profesional y Universidades, Sergio Silva, ha manifestado su condena «absoluta» y un rechazo «total» a los hechos, que han salido a la luz este miércoles en un programa de televisión.
Tras esta agresión la Consejería ha informado en un comunicado de que ha abierto el protocolo de acoso escolar, que prioriza la atención de las víctimas manteniendo la atención en un caso que «requiere toda nuestra profesionalidad y atención», ha puntualizado el titular del área.
«Es inadmisible y quiero mostrar toda la rabia por lo sucedido y mi tristeza porque menores puedan verse involucrados en acontecimientos de este tipo», ha asegurado Silva, quien también ha manifestado su «total apoyo» al alumno y a su familia, con quien ya ha podido hablar esta misma mañana.
El consejero ha ofrecido toda su solidaridad al alumno y su entorno más cercano y ha resaltado como «prioridad» ofrecerles una atención «absoluta», que garantice «el bienestar y la protección» del menor, así como resolver todo lo acontecido de «la mejor manera posible».
EXPEDIENTE Y EXPULSIÓN 5 DÍAS
Además, el consejero ha mantenido esta mañana una reunión con el Servicio de Inspección Educativa y ha sido informado sobre la apertura de procedimiento disciplinario ordinario, por parte del centro, a los responsables de la agresión.
Esta medida ha supuesto la toma de medidas cautelares y la expulsión de cinco días del centro a los menores implicados, el plazo máximo que permite la ley.
Al iniciarse un procedimiento por vía penal, incoado por parte de la familia, el expediente disciplinario se ha detenido, pero a pesar de ello la Consejería ha decidido activar el protocolo de acoso escolar para investigar este suceso y la situación previa a la agresión. Además, la familia ha sido recibida en el centro y se mantiene «contacto directo» ellos.
«Voy a hacer todo lo que esté en mi mano para solucionar este asunto lo antes posible», ha subrayado Silva tras conocer la agresión, que tuvo lugar en el recinto del centro educativo y que fue perpetrada por unos compañeros de clase del agredido.
Tal y como ha señalado el consejero, hay que valorar todas las cuestiones para hacer efectivo «lo que más nos preocupa ahora», que no es otra cosa que «atender al alumno afectado, ofrecerle todo nuestro apoyo y protección para conseguir un entorno lo más seguro posible».