La economía de Cantabria crece un 2,3% en el segundo trimestre de 2024

La economía en Cantabria ha experimentado un crecimiento «moderado» durante el 2024, en cuyo segundo semestre el PIB de la región creció un 2,3 por ciento interanual, aunque este incremento sigue por debajo del promedio estatal (2,9%) y la Comunidad mantiene una diferencia superior a 7 puntos en términos de PIB per cápita respecto a la media nacional.

Esta recuperación se debe a aspectos como la baja tasa de paro, la moderación de la inflación, el crecimiento de los servicios y la recuperación del sector de la construcción.

Así se desprende del segundo ‘Informe de la Coyuntura Económica’ del Colegio de Economistas de Cantabria y que ha presentado este viernes en rueda de prensa su presidente, Fernando García Andrés, y el profesor del Departamento de Economía de la Universidad de Cantabria, Marcos Fernández.

En concreto, en 2024 el PIB de Cantabria está creciendo a un ritmo superior al de 2023 y ha alcanzado un crecimiento del 2,3% interanual en el segundo trimestre del año. Sin embargo, este aumento continúa por debajo del promedio estatal (2,9%) y de las comunidades limítrofes del País Vasco, Asturias y Castilla y León.

El documento, que recoge datos disponibles en fuentes oficiales hasta el 13 de septiembre, destaca para ese crecimiento de la economía de Cantabria fortalezas como la baja tasa de paro (8,5%), la moderación de la inflación (excesivamente elevada en los dos años anteriores), el crecimiento del sector servicios y la recuperación de la construcción.

A ello se une la «notable» disminución de la inflación a lo largo de 2024. Al respecto, el Índice de Precios al Consumo (IPC) cerró agosto con un crecimiento interanual del 2%, lo que supone una mejora frente al 3,3% registrado al final de 2023. El IPC subyacente también se ha reducido, aunque sigue siendo ligeramente superior al 2,5%.

Tanto García Andrés como Fernández han coincidido en destacar que estos datos de la economía regional son «moderadamente buenos», ya que, aunque están «por encima de lo esperado», siguen estando por debajo de la media.

Fernández, en contra, ha detallado las debilidades de la economía regional, que la hace crecer por debajo del resto de España y que ahonda la brecha en PIB per cápita, como son la «lenta y excesivamente» estacional creación de empleo, el declive del sector primario y la caída tanto en exportaciones como en importaciones, que acrecienta la limitada apertura al comercio exterior.

Mientras, el presidente del Colegio ha abogado por una mayor inversión para fomentar la innovación en la estructura empresarial regional, dominada por pymes y micropymes, que impulsen su crecimiento y competitividad.

Asimismo, a preguntas de la prensa, se ha mostrado partidario de la reducción de la jornada laboral siempre que esté basada en hacer que el trabajo sea «eficiente», apoyado en tecnologías que aumenten la productividad.

MERCADO LABORAL Y ACTIVIDAD EMPRESARIAL

Por otra parte, el empleo en Cantabria continúa creciendo, aunque a un ritmo inferior al promedio nacional, especialmente en sectores clave como la industria.

La afiliación a la Seguridad Social registró un crecimiento del 1,7% interanual en agosto, frente al 2,3% para la media española. No obstante, la tasa de paro se mantiene en un 8,5%, lo que sitúa a la región por debajo de la media nacional, conservando una posición «favorable» en el mercado laboral.

El informe también señala que el sector empresarial muestra «señales de recuperación», con un crecimiento en la creación de empresas, aunque persisten problemas estructurales en términos de inversión en el ámbito de la innovación y el I+D.

Según reflejaba la primera edición del Informe, los últimos datos sobre el gasto en I+D en Cantabria muestran una situación «desfavorable» respecto al resto del país.

En 2022, se situó en el 0,90% del PIB, muy por debajo de la media nacional (1,44%) y de las comunidades limítrofes, salvo Asturias (0,84%).

Asimismo, el gasto en I+D empresarial fue aún menor, alcanzando sólo el 0,36%, frente al 0,81% a nivel nacional, con una diferencia «notable» respecto al País Vasco (1,69%).

DECLIVE DEL SECTOR PRIMARIO

En cuanto a sectores, Fernández ha comentado que el primario continúa en «declive», tanto en términos de empleo como de número de empresas registradas. Finalizó 2023 con una reducción interanual cercana al 3% en el número de afiliados a la Seguridad Social y durante 2024 esta tendencia descendente ha persistido, aunque de manera «más moderada». En agosto se registró una caída del 1,8% interanual.

Por su parte, el informe resalta que el sector industrial ha mostrado «notables» oscilaciones productivas y la creación de empleo sigue siendo baja, con una afiliación a la Seguridad Social que creció en agosto el 0,7% interanual, cifra «notoriamente» inferior al promedio estatal (1,5%) y a las de CCAA limítrofes, salvo el País Vasco.

Mientras, la afiliación a la Seguridad Social en la construcción ha experimentado un aumento en lo que va de 2024 (un 0,9% interanual en agosto), lo que refleja una mejora en la actividad, aunque continúa siendo inferior a la media española (1,8%).

En este sentido, los datos de transacciones de vivienda y de visados de obra nueva muestran un «destacado» incremento en los últimos meses, lo que se asocia a una «incipiente» recuperación del sector.

Por su parte, el sector servicios continúa siendo el motor del crecimiento en Cantabria, con una subida del 2,2% interanual en la afiliación a la Seguridad Social en agosto. Sin embargo, este dato sigue por debajo del promedio estatal (3%), donde las actividades terciarias también están liderando el crecimiento nacional.

Según ha destacado Fernández, Cantabria tiene un «importante» margen de crecimiento en los servicios intensivos en conocimiento, que representan el 37,2% del empleo en la región, frente al 38,1% de la media española y el 41,3% en la media de la UE-27.

EXPORTACIONES Y SECTOR PÚBLICO

Las exportaciones en Cantabria mantienen una tendencia negativa este año en el que cayeron un 2,6% interanual en agosto, mientras que las importaciones disminuyeron un 8,8%.

Según ha explicado Fernández, los datos subrayan la «falta de apertura» de la economía regional al comercio exterior, lo que «limita su desarrollo».

En cuanto a las cuentas públicas, la Comunidad finalizó junio con un déficit del 1,26% del PIB, resultado de un aumento en los gastos no financieros y un estancamiento de los ingresos.

PREVISIONES ECONÓMICAS

El informe concluye que la región continuará durante 2024 en una senda de crecimiento económico «moderado», si bien a un ritmo «más lento» que la media estatal.

Las expectativas económicas, en particular a medio y largo plazo, dependerán «en gran medida» de la evolución de sectores «clave» como la industria, los servicios intensivos en conocimiento y el comercio exterior, y de su capacidad para dinamizar la creación de empleo y la competitividad de la región.

Por otra parte, la estabilidad de las cuentas públicas y la contención de la inflación serán también «factores importantes» para favorecer «una recuperación sostenible y equilibrada» en los próximos trimestres.

Este informe, elaborado por los profesores Marcos Fernández y Alejrando Bedia, ofrece un análisis de la evolución de la economía regional durante 2024 centrado en más de 60 indicadores clave, como el crecimiento económico, los precios, el mercado de trabajo o la actividad empresarial e innovación, lo que permite evaluar su rendimiento frente a la media nacional y las comunidades autónomas limítrofes.