La IGP ‘Carne de Cantabria’ se ampliará a cuatro razas bovinas
Charolesa, pirenaica, blonda de Aquitania y fleckvieh
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, se ha reunido con los representantes de las asociaciones de las razas de ganado bovino charolesa, pirenaica, blonda de Aquitania y fleckvieh para anunciarles que el Gobierno regional ha iniciado el proceso para ampliar la Indicación Geográfica Protegida (IGP) ‘Carne de Cantabria’ con estas cuatro razas.
El titular del departamento ha presentado los resultados de un informe encargado por su departamento a la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza que avala la incorporación al sello de calidad de estas razas cárnicas, ha informado este lunes el Ejecutivo en nota de prensa.
«Se ha dado un gran paso para poner en valor el conjunto de las ganaderías cántabras», ha valorado el consejero, que ha explicado que el sistema de manejo y de alimentación de los animales son los elementos prioritarios para alcanzar el sello de calidad.
Así, el informe valora tanto las prácticas de cría y alimentación con amamantamiento como el aprovechamiento tradicional de los pastos y no tiene «tanto en cuenta» la raza del animal sino sus cuidados.
Blanco ha asegurado que este es «un día especial para la ganadería de Cantabria», un sector, a su juicio, estratégico en la economía regional y en el desarrollo del medio rural por su papel en la sostenibilidad medioambiental, la gestión del territorio y el mantenimiento de la actividad agroganadera.
Por su parte, los representantes de las asociaciones ganaderas han mostrado su «satisfacción» porque este consejero haya sido «capaz de desbloquear la ampliación de la IGP de Cantabria» y haya demostrado «su compromiso firme con este proyecto y con los ganaderos de Cantabria».
«Es una respuesta que esperábamos todos, que necesitábamos en el sector y llevábamos peleando hace mucho tiempo y que va a permitir que todas las razas cárnicas de Cantabria compitan en las mismas condiciones», han trasladado los representantes de las asociaciones ganaderas.
Ampliación a cuatro razas
El Gobierno ha explicado que encargó un estudio bibliográfico a la Universidad de Zaragoza «para ver qué posibilidades existían de ampliar el sello de calidad IGP ‘Carne de Cantabria’ con las razas de ganado bovino charolesa, pirenaica, blonda de Aquitania y fleckvieh sin modificar los parámetros que han permitido que Cantabria cuente con este sello».
Tras este encuentro y contar con el «consenso» de los representantes de las organizaciones ganaderas, ha anunciado que trasladará la petición al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para tramitar la ampliación de la IGP.
Si la propuesta cuanta con el visto bueno del Ministerio, la solicitud se remitirá a la Unión Europea, de quien depende la decisión final sobre dicha ampliación.
Sello de calidad IGP ‘Carne de Cantabria’
La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente impulsó en 2001, junto con las organizaciones agrarias de la región, la creación de un sello de calidad para reconocer y amparar la producción de carne de Cantabria con el objetivo de generar rentas a los ganaderos, asentar a la población rural y ofrecer a los consumidores de un producto obtenido de forma tradicional y con las máximas garantías de calidad y trazabilidad.
Así, ese mismo año se aprobó el reglamento de la IGP ‘Carne de Cantabria’ y pasó a formar parte del registro de productos de calidad de la Unión Europea en 2004, regulando tanto las razas autorizadas (tudanca, monchina, pardo-alpina, limusina, asturiana y sus cruces), como el sistema de producción, la alimentación y la presentación del producto, teniendo en cuenta que todo el proceso desde que nace el animal hasta el sacrificio ha de realizarse en Cantabria.
También dicho sello de calidad establece el sistema de control al que han de someterse, tanto las explotaciones como las industrias de manipulación, así como un sistema de sellado e identificación de
canales y piezas que permite su identificación en cualquier momento de su faenado y comercialización, garantizándose de este modo la trazabilidad del producto y por tanto su origen.
Este sistema de control de la carne es llevado a cabo por la Oficina de Calidad Alimentaria de Cantabria (ODECA) a lo largo de todo el proceso productivo para poder realizar el seguimiento de la trazabilidad a lo largo de la cadena, desde las explotaciones ganaderas, las industrias y la distribución hasta el consumidor final.