La incertidumbre por la guerra y la inflación frenan la expansión privada en España
El crecimiento de la actividad del sector privado en España se desaceleró en marzo como consecuencia de la incertidumbre generada por la guerra en Ucrania y las presiones inflacionistas, así como los problemas de suministro agravados por el paro de los transportistas, según refleja el índice compuesto de gestores de compra (PMI), elaborado por S&P Global.
El PMI de marzo se situó en 53,1 puntos, frente a los 56,5 del mes anterior, una lectura que aún expresa crecimiento de la actividad. En el caso del sector servicios, el PMI retrocedió a 53,4 puntos desde los 56,6 de febrero, mientras que en el sector manufacturero cayó a 54,2 puntos, frente a los 56,9 del mes anterior.
«Los problemas de suministro, las presiones de los precios y la incertidumbre creada por la guerra en Ucrania limitaron los incrementos de la producción industrial y de la actividad comercial en el sector servicios», explican los responsables de la encuesta.
En el caso de los precios, durante el mes de marzo se observó una aceleración de la inflación en ambos sectores, lo que contribuyó al incremento más fuerte registrado en la serie de los gastos operativos del sector privado, así como también a un nuevo récord en la inflación de los precios cobrados.
Asimismo, la confianza sobre el futuro cayó hasta su nivel más bajo en casi un año y medio, aunque las empresas españolas mantuvieron un grado suficiente de optimismo para contratar más personal y extender la secuencia actual de expansión del empleo a doce meses.