La presidenta de Cantabria y los consejeros se subirán el sueldo un 6,9% en 2024
La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, y los consejeros se subirán el sueldo un 6,9% el próximo año, de modo que la jefa del Ejecutivo cobrará un euro más que el resto de altos cargos, mientras que los consejeros seguirán con un sueldo inferior.
Hasta ahora, en Cantabria, el presidente y los consejeros cobran menos que los jefes de gabinete y los directores generales. En el caso de los consejeros, perciben 6.000 euros anuales menos que sus jefes de gabinete.
Así lo ha anunciado este martes en rueda de prensa la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, que ha explicado que este incremento de las retribuciones se llevará a cabo a través de una enmienda al proyecto de Presupuestos Generales de Cantabria que registrará hoy el Grupo Popular y que se ha comunicado al resto de grupos políticos.
Con esta iniciativa, que saldrá adelante si se aprueba el Presupuesto, se pretende corregir un «desequilibrio incomprensible, carente de lógica y único en España», de que cargos con menor responsabilidad tengan un sueldo más elevado que los miembros del Consejo de Gobierno.
Según ha explicado, esta subida supondrá un gasto total de 25.163 euros y permitirá que la presidenta cobre 70.083 euros anuales, un euro más que los directores generales y jefes de gabinete; y que los consejeros perciban 66.983,21 euros, todavía menos que los citados altos cargos.
En el incremento salarial del 6,9% respecto a 2023 está incluida la subida del 2,5% contemplada en 2024 para todos los empleados y cargos públicos de España, más un 4,4% adicional para «corregir esta anomalía» que anualmente se produce en las retribuciones de la presidenta y los consejeros respecto al resto de altos cargos.
«Si a la presidenta de Cantabria en el año 2024 le correspondía cobrar con el aumento de los empleados públicos 67.195 euros, cobrará un 4,4% más. Es decir, se equipará el sueldo de la presidenta al de los altos cargos del Gobierno. Porque ningún ciudadano entiende que el máximo representante de Cantabria cobre menos que alguien que tiene menos responsabilidad», ha subrayado Urrutia.
La consejera ha reiterado que se trata de «revertir una situación inaceptable» que se lleva produciendo en Cantabria desde 2010, cuando el entonces presidente José Luis Rodríguez Zapatero recortó el sueldo a los empleados públicos.
En este sentido ha recordado que se redujo el sueldo un 8% a los directores generales y jefes de gabinete y un 15% a los consejeros y al presidente, de forma que, a partir de ese momento, «los que estaban por debajo del Consejo de Gobierno, incluidos los que no tienen labores ejecutivas, como son los directores de gabinete, empezaron a cobrar más que los miembros del Consejo de Gobierno».
Urrutia ha denunciado que cuando se presentó el proyecto de presupuestos en el Parlamento, los grupos de la oposición, «a pesar de que conocían esta circunstancia» y el aumento en los sueldos del Consejo de Gobierno, llevaron a cabo una «utilización demagógica y populista» de dicho incremento, lo que llevó a la presidenta a anunciar que renunciaban a la subida «para no desviar el debate sobre la aprobación de los presupuestos más sociales y más reales de la historia de Cantabria» por parte de un Ejecutivo en minoría.
Entonces se anunció que la renuncia se llevaría a cabo a través de una enmienda del PP, «sin dejar por el camino nuestro posicionamiento clarísimo» de que «no puede ser» que «cuanta más responsabilidad política, jurídica y patrimonial, menos sueldo se tiene».
Al respecto, ha asegurado que el planteamiento del Gobierno «no es económico, sino para revertir una situación de desequilibrio que no se dá en ninguna comunidad autónoma, en ningún ayuntamiento y en ninguna empresa. Como nadie entendería que el director de un hotel cobre menos que el recepcionista».
En este sentido, ha incidido en que los consejeros han renunciado a una subida mayor al entender «que este no es el momento para un incremento superior, aunque justo, porque puede no ser entendido por los ciudadanos y menos en los primeros meses de la legislatura».
Cuestionada sobre si el Ejecutivo se ha planteado reducir los salarios de los altos cargos, Urrutia ha asegurado que no lo ha hecho «nunca» porque «este Gobierno no tuvo la culpa de la decisión que se adoptó en 2010, que es de donde viene el problema».
Porque «está muy bien reducir los sueldos, pero luego no encontrar a un jefe de servicio, un letrado, que se venga a ser consejero para perder, por ejemplo, 12.000 euros al año. Pues tiene que tener mucha vocación, poca responsabilidad familiar y muchas ganas de trabajar con una consejería en la que vas a tener más responsabilidad que nadie», ha observado la consejera, que ha considerado que son los políticos quienes se tiran piedras contra su propio tejado.
También a preguntas de la prensa sobre si el incremento inicial del 20% se había hablado con el PRC, que apoyó el proyecto presupuestario, Urrutia ha asegurado que los regionalistas sabían «que se iba a equiparar el sueldo respecto a lo que sucedió en el año 2010, que se iba a revertir esa situación anómala» aunque no ha confirmado que fuera en el citado porcentaje.
De hecho, ha subrayado que «se ha hablado con todos los grupos parlamentarios en todos los momentos», es decir, también ahora para presentar la enmienda.