La Sociedad de Cultura y Deporte hereda un agujero de 13 millones de euros, según el Gobierno regional
Hay 8,5 millones pendientes de pago de obras en La Lechera, el Palacio Jaime del Amo, el Palacio de Festivales y las escuelas de Fontibre
El Gobierno regional (PP) ha sacado a la luz un «agujero» de casi 13 millones de euros en la Sociedad Regional de Educación, Cultura y Deporte (SRECD) heredado de los anteriores gestores, los socialistas, a quienes ha acusado de no llevar un control de los fondos y utilizar dinero que estaba consignado para algunas obras para pagar gastos corrientes.
Así, la SRECD se encuentra «en quiebra técnica», según ha dado a conocer este jueves la consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Eva Guillermina Fernández, quien ha señalado que empezar el año con la deuda existente les «deja sin margen de maniobra y compromete seriamente el funcionamiento de la Sociedad».
Algo que llevaría a tener que disolver la SRECD si no fuera porque el Gobierno va a sanear las cuentas utilizando fondos de las entregas a cuenta que Cantabria recibirá este año del Ministerio de Hacienda, que en total son 133 millones.
«Hemos heredado el problema pero vamos a poner la solución», ha sentenciado la consejera, que ha ofrecido una rueda de prensa acompañada por el director de la SRECD, Gustavo González; y al director general de Cultura y consejero delegado de la Sociedad, José Antonio González Fuentes.
Pese a que el PP llegó al Gobierno en julio, la titular de Cultura ha indicado que el «agujero» no se ha dado a conocer antes porque ha sido «sumamente complicado» recabar toda la documentación, pero que a finales de 2023 ya se vieron obligados a inyectar más de 4 millones de euros de otras partidas para reducir la deuda, que ascendía a casi 13 millones.
Así, quedan aún pendientes por pagar unos 8,5 millones de euros, casi la mitad correspondientes a la primera fase del proyecto de rehabilitación de La Lechera de Torrelavega y el resto a las obras del Palacio Jaime del Amo (2,5 millones), la terraza del Palacio de Festivales (1,4 millones) y las escuelas y la casa del maestro de Fontibre (81.688 euros).
Actuaciones para las que, según Fernández, no existía una cuenta bancaria individualizada, sino que su dotación ha ido a la caja común y «de ahí se ha ido tirando a conveniencia para todo tipo de pagos», como a proveedores.
«Puro y duro gasto corriente en una permanente huida hacia delante». «Se ha gastado sin ton ni son por no tener un control», ha incidido, denunciando la «pésima gestión» de los socialistas y de su secretario general, Pablo Zuloaga, que en la anterior legislatura, con el Gobierno PRC-PSOE, era el consejero de Cultura.
«Éste es el legado del señor Zuloaga, la herencia recibida de la que tanto le gusta alardear», ha apostillado, asegurando que se ha gastado «por encima de las posibilidades» y que los mismos hechos, de producirse en una empresa privada, hubieran supuesto su cierre.
NUEVA ETAPA: SIN RECORTES PERO CON CONTROL
Y ante esta «negligencia» que atribuye al PSOE, la consejera ha remarcado que el PP comienza «una nueva etapa» poniendo «el contador a cero» en la SRCD, en la que se harán las cosas «con rigor y responsabilidad» y se convertirá a la Sociedad «en un ente publico al servicio de los ciudadanos y no un chiringuito para los caprichos del señor Zuloaga».
Para ello se sanearán las cuentas gracias a que el PP «ha hecho los deberes» elaborando un Presupuesto para 2024 con deuda cero y pensado «para el peor de los escenarios posibles», lo que le permite poder hacer uso de las entregas a cuenta, ha dicho Fernández; y por otro lado se seguirá un «férreo control» del gasto, que es lo que «hasta ahora no había».
Para ello, en cuanto llegue el dinero con el que se ‘rescatará’ a la SRECD se crearán cuentas separadas para el pago de cada una de las obras pendientes de abonar, y se empezará a gestionar «de cero» sin deuda.
La consejera ha asegurado que «no es su intención que haya recortes» en las instalaciones y proyectos que dependen de la Sociedad, sino que haya una «mejor gestión». Eso sí, se repasarán los contratos para decidir en qué debe invertirse y en qué no –por ejemplo en el caso de los patrocinios deportivos–.
También ha asegurado que el Palacio de Festivales «no va a sufrir recortes, y mantendrá una programación con «excelente calidad» al ser un «buque insignia» para Cantabria.