Las carreteras cántabras han registrado 1.333 accidentes de motocicletas en los últimos seis años con 19 fallecidos
La delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, ha considerado «especialmente preocupante» que en los últimos años se haya triplicado el número de accidentes de este tipo. De hecho, en 2023 se alcanzó la cifra más alta de fallecidos en una década, con siete personas que perdieron la vida en este tipo de accidentes. De las 21 personas que el año pasado fallecieron en las carreteras de Cantabria, 7 circulaban en motocicleta, 1 de cada 3.
Además, el comienzo de este año 2024 está siendo igualmente negativo, pues en los primeros cuatro meses del año han fallecido 9 personas en las carreteras de Cantabria.
Este incremento de la siniestralidad se produce en un contexto en el que el uso de la motocicleta se ha incrementado significativamente en Cantabria. El parque de motocicletas ha aumentado en la región un 32% en los últimos siete años, hasta superar las 2.000 matriculaciones en 2023.
Gómez de Diego ha expuesto estos datos con motivo de la presentación de la campaña de control de motocicletas que la Jefatura Provincial de Tráfico en Cantabria, en colaboración con el Sector de Tráfico de la Guardia Civil y la Policía Local de Santander y Torrelavega, está llevando a cabo esta semana en toda la comunidad autónoma.
La campaña tiene como objetivos principales conseguir comportamientos más seguros en la carretera y concienciar sobre el uso adecuado de protecciones, con el fin de reducir el número y la gravedad de accidentes de tráfico en los que se ven involucradas motocicletas.
Durante la campaña, la Guardia Civil de Tráfico intensificará los controles en las carreteras de Cantabria, prestando especial atención a la velocidad, especialmente en carreteras convencionales y zonas de montaña.
Además se realizarán controles de alcoholemia y drogas a los conductores de motocicletas; se verificará que las motocicletas tengan la ITV en vigor; se controlará que los adelantamientos se realicen de forma segura y respetando la normativa; y se comprobará que los conductores y pasajeros de las motocicletas lleven el casco y la equipación adecuados.
La delegada del Gobierno ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de todos los conductores de motocicletas, a quienes ha pedido que sean conscientes de su mayor vulnerabilidad en la carretera.
«Este tipo de vehículos es un medio de transporte muy adecuado y también un hobby para muchos cántabros. Sin embargo, no podemos pasar desapercibido este incremento de la siniestralidad vial que se está registrando en las carreteras cántabras, con consecuencias fatales», ha añadido.
En este contexto, ha recordado que recientemente se ha celebrado la Junta de Seguridad Vial y el balance del año 2023 en cuanto a la siniestralidad ha sido negativo, pues se constataba un incremento en el número de accidentes, el número de personas heridas gravemente y también el de las personas que han perdido la vida.
«Por eso, no podemos dejar de insistir y de hacer un llamamiento a tomar conciencia de la responsabilidad de todos para reducir la siniestralidad vial. Con esta campaña y con el resto que se van a llevar a cabo a lo largo del año, la DGT y la Guardia Civil de Tráfico queremos contribuir a reducir el número de accidentes en Cantabria y salvar vidas.», ha concluido Gómez de Diego.
GRUPO DE TRABAJO
Al control que se ha llevado a cabo este martes en Gajano, además de la delegada del Gobierno, han asistido el jefe provincial de Tráfico de Cantabria, José Miguel Tolosa, y Rodolfo Castillo, parapléjico como consecuencia de un accidente de moto que colabora habitualmente con la DGT en jornadas de concienciación y sensibilización.
Según ha informado Tolosa, este martes se ha constituido el grupo de trabajo para abordar el incremento de la siniestralidad vial ligado a las motocicletas, tal y como se acordó en la Comisión Autonómica del Consejo Superior de Tráfico, Seguridad Vial y Movilidad Sostenible celebrada en abril.
Este grupo de trabajo tiene como fin abordar y desarrollar estrategias para mitigar este problema, y en el mismo participan la Jefatura Provincial de Tráfico de la DGT, la Sección de Tráfico de la Guardia Civil, las Policías Locales de Santander y Torrelavega, las Demarcaciones de Carreteras estatal y autonómico, la ITV, la Consejería de Turismo del Gobierno de Cantabria, representantes de la compañía Britanny Ferries y el propio Rodolfo Castillo.
En los últimos dos años, se ha pasado de registrar entre 100 y 150 accidentes de motocicletas al año en 2019, 2020 y 2021 a superar los más de 300 en 2022 y 2023. En consecuencia, también se ha incrementado notablemente el número de heridos y el de personas fallecidas.