Los helicópteros del Gobierno transportarán a agentes forestales a incendios en zonas de difícil acceso

Los dos helicópteros con los que cuenta el Gobierno de Cantabria transportarán a partir de ahora a agentes del Medio Natural y a bomberos forestales hasta incendios a los que no es posible acceder por tierra o en los que se requiera una rápida presencia de efectivos.

Así lo han dado a conocer la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, y el consejero de Desarrollo Rural, Pablo Palencia, que han estado este miércoles en un acto celebrado en la helisuperficie ubicada en el parque de bomberos con el que el 112 cuenta en Villacarriedo, donde han presenciado uno de los ejercicios que habilitan a los efectivos de Montes para realizar los vuelos.

Urrutia ha explicado que «Cantabria tiene muchas áreas de difícil acceso o, incluso, a las que es imposible llegar por tierra», lo que se ha podido comprobar en la última oleada de incendios del mes de febrero, saldada con 83 fuegos, en parajes altos del Castro Valnera (Vega de Pas), Coterotejo (Selaya) o Pudrigero (Carmona).

En palabras de la consejera, con los porteos aéreos –que se van a empezar a hacer fruto de «la colaboración interdepartamental» y que no suponen «ningún nuevo coste a la Administración»– se van a reducir los tiempos de respuesta en la extinción de forestales.

Urrutia ha remarcado que la salvaguarda y defensa de las personas y el patrimonio «va más allá de ámbitos competenciales», y que desde el Gobierno de Cantabria se promueve la «colaboración, coordinación, la eficiencia y la celeridad en la respuesta», fomentando «una asistencia global en la que todos los cuerpos intervinientes son uno».

Por este motivo, ha dicho, se refuerza con estos vuelos de transporte la «colaboración integral» que ya se lleva a cabo con la realización de apoyos aéreos para la descarga de agua en zonas de difícil acceso o parajes de gran riqueza afectados por incendios forestales.

En esta idea ha ahondado también el consejero de Desarrollo Rural, que ha afirmado que «medidas coordinadas como ésta dan visibilidad a un verdadero trabajo en equipo orientado a dar servicio a la sociedad», en este caso con la problemática de los incendios forestales. «Hay un solo Gobierno, una sola respuesta y un solo trabajo», ha concluido.

En este sentido, ambos han apuntado como vías de colaboración la redacción y publicación de un nuevo Plan Especial de Protección Civil sobre Incendios Forestales (INFOCANT), la gestión de la contaminación marítima por microplásticos o la propia intervención aérea en los incendios forestales.

HELICÓPTEROS DEL GOBIERNO

Los dos helicópteros de la Dirección General de Seguridad Ciudadana son el Maya Dama y el Delta Romeo.

El primero tiene un aforo de cuatro personas por vuelo, además de la tripulación, y una capacidad de descarga de agua de 800 litros. Como potencialidad de esta aeronave destaca que su sistema de transporte de agua, conocido como ‘bambi’, permite la descarga progresiva y no con una suelta única, posibilitando realizar varias pasadas aéreas sin necesidad de recarga.

Por su parte, el Delta Romeo, dependiendo de su configuración puede transportar entre 5 y 14 efectivos y lanzar 1.200 litros de agua.

Con la primera de las aeronaves se realizó recientemente la primera prueba de la eficacia de los transportes que hoy se ha presentado, llevando a tres Agentes del Medio Natural a efectuar una valoración sobre el terreno de un incendio en Soba, inaccesible vía terrestre.

63 DESCARGAS EN LO QUE VA DE AÑO

Tan solo en el mes y medio que llevamos de 2024 han sido 7 los vuelos realizados en el marco de la lucha contra el fuego, con 63 descargas, equivalentes a 50.400 litros de agua. En el pasado ejercicio los helicópteros del Ejecutivo efectuaron un total de 31 apoyos aéreos, en los que descargaron casi 300.000 litros de agua sobre zonas de alto riesgo o difícil acceso terrestre.

Los consejeros, que han estado acompañados por los directores generales de Seguridad Ciudadana, Mónica Escobedo; Montes y Biodiversidad, José Causí; y el 112, Samuel Ruiz, han recordado que Cantabria se encuentra aún en la época de mayor riesgo de incendios, comprendida entre diciembre y marzo.