Los rescatadores logran sacar el cuerpo del espeleólogo francés fallecido en una cueva de Soba
El operativo de rescate formado por más de 30 efectivos ha conseguido en torno a las 4.00 de la madrugada extraer el cuerpo del espeleólogo francés fallecido ayer en una cueva no explorada en Soba, cerca del Portillo de la Sía.
Desde entonces efectivos del Grupo de Rescate de Montaña (GREIM) de la Guardia Civil de Potes han custodiado el cadáver en la boca de entrada a la cavidad, a la espera de que amaneciera y el helicóptero del Gobierno de Cantabria trasladara el cuerpo hasta el aeropuerto Seve Ballesteros.
En torno a las 9.00 horas, la aeronave ha puesto rumbo al lugar del suceso y, una vez el cuerpo llegue al aeropuerto, quedará bajo custodia de la Guardia Civil, según ha informado el Gobierno cántabro.
El dispositivo, integrado por miembros del GREIM, del equipo de espeleosocorro de Cruz Roja y técnicos de la Dirección General de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de Cantabria, logró liberar al accidentado del lugar en el que se encontraba atrapado sobre las 23.00 horas de anoche, una zona bastante inestable y de difícil acceso por el desprendimiento de rocas que ocasionó la muerte del espeleólogo.
Fueron sus dos acompañantes, también de nacionalidad francesa, quienes dieron aviso a los servicios de emergencia. A partir de ahí, se inició una compleja maniobra de extracción que ha requerido la realización de pequeñas voladuras para poder desobsturuir el paso y llevar el cuerpo en camilla hasta la salida. Para ello, han tenido que superar pasos muy angostos y dos pozos de 25 y 7 metros de altura, estos últimos con maniobras de contrapesos.
Para recuperar el cuerpo, se movilizó a más de 30 efectivos entre técnicos de la Dirección General de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de Cantabria, espeleólogos de Cruz Roja, Greim de Potes, Guardia Civil y voluntarios de la Agrupación de Protección Civil de Ramales de la Victoria, repartidos en diferentes equipos.