Más de 35.000 trabajadores cántabros están afectados por convenios colectivos sectoriales pendientes de actualizar
Más de 35.000 trabajadores de Cantabria están afectados en la actualidad por convenios colectivos sectoriales cuya vigencia ya ha expirado y aún no se han renovado, según un estudio elaborado por UGT, que precisa que entre ellos figura el de mayor número de asalariados de la región, el de la industria siderometalúrgica.
Según ha informado en un comunicado el secretario de Acción Sindical de la Federación de Industria del sindicato, UGT-FICA, Carlos Meneses, la vigencia del convenio colectivo de la industria siderometalúrgica de Cantabria, que afecta a unos 20.000 trabajadores, expiró en diciembre de 2020 y, aunque se constituyó la mesa de negociación el pasado mes de septiembre, ésta todavía no se ha iniciado.
Por su parte, el convenio colectivo de limpieza de edificios y locales e industrial de Cantabria, que afecta a 8.000 trabajadores, se está negociando en la actualidad para renovar el suscrito en 2018, con vigencia hasta diciembre del año pasado.
UGT y CCOO han convocado el próximo lunes 15 de noviembre una concentración ante la sede del Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Colectivos (ORECLA) para desbloquear la negociación del nuevo convenio colectivo regional del sector de la limpieza.
Por su parte, el resto de los convenio colectivos sectoriales de Cantabria pendientes de actualizar corresponden al comercio y afectan a casi 9.000 trabajadores. En concreto, son los del comercio textil; el de piel, cuero y calzado; el del comercio del metal; el de frutas y hortalizas; y el del comercio y embotellado de vinos y bebidas.
La responsable de Acción Sindical de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo (FeSMC) de UGT, Mar Río, ha indicado que en la mayoría de estos convenios del sector del comercio la negociación «está paralizada, medio paralizada o simplemente ni se ha iniciado», pese a que todos finalizaron su vigencia en 2019 ó 2020.
AMENAZA DE CONFLICTIVIDAD LABORAL
«Si las patronales no se sientan a negociar en serio y con verdadera voluntad de llegar a acuerdos, recurriremos como ya hemos hecho en otras ocasiones a demandas de conflictos colectivos y la propia conflictividad laboral crecerá de por sí», ha advertido Río.
En este sentido, ha señalado que, con la pandemia, la negociación colectiva se ha ralentizado, «las patronales se han relajado y se han centrado más en los ERTE que en actualizar las condiciones laborales, sociales y económicas de los trabajadores», y además, la reforma laboral «les favorece su estrategia inmovilista».
«Con la reforma laboral se da prevalencia a los convenios colectivos de empresa sobre los del sector y muchos empresarios se frotan las manos; y sin ultraactividad que garantice la continuidad de un convenio de sector recurrirán a la estrategia de dejarlo morir y solicitar de inmediato uno de ámbito superior de empresa que les conviene», ha sostenido.
UGT ha subrayado además que la negociación salarial de 2021 se está viendo alterada por el propio impacto de la pandemia en la actividad económica y el empleo, la inexistencia en la actualidad de un Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva que establezca criterios comunes y «el fuerte e inesperado acelerón de la inflación que pervierte las expectativas iniciales de poder adquisitivo».
Para Río, «ya no vale de excusa la pandemia y sus efectos porque todas las estadística confirman la recuperación económica, como tampoco es válido que sigamos sujetos a una reforma laboral que desequilibra la negociación colectiva y otorga un gran poder a los empresarios para no firmar acuerdos y no actualizar o renovar los convenios».