Revilla y Urkullu escenifican la apertura entre Cantabria y Euskadi llamando a la prudencia

Los presidentes de Cantabria y Euskadi, Miguel Ángel Revilla e Iñigo Urkullu, respectivamente, han escenificado este viernes la recuperación de la movilidad entre ambas comunidades con una llamada a la prudencia y a guardar las medidas de prevención contra el coronavirus, después de que los dos territorios hayan levantado el estado de alarma y entrado en la «nueva normalidad».

El acto se ha celebrado a las nueve de la mañana en el barrio de Cobarón de la localidad vizcaína de Muskiz, en el límite entre las dos comunidades vecinas, donde Revilla y Urkullu se han encontrado a las 9.00 horas portando mascarillas, y se han saludado con el codo, para cumplir con las medidas de seguridad.

Ambos presidentes han realizado un breve recorrido por la Vía Verde del Paseo de Itsaslur, de Vizcaya, que conecta con la Vía Verde del Piquillo, en Cantabria. Desde allí se puede ver la localidad cántabra de Castro Urdiales y el ‘superpuerto’ de Bilbao. Con este acto, han simbolizado la reapertura de la movilidad entre ambas comunidades.

En declaraciones a los numerosos medios de comunicación congregados en el lugar ambos han incidido en la importancia de cumplir las recomendaciones para evitar el contagio y preservar el esfuerzo realizado en estos meses de estado de alarma. También han tenido palabras de recuerdo para los fallecidos durante la pandemia.

En el caso de Revilla, que ha comenzado su intervención con unas palabras en euskera, ha señalado que los habitantes de ambas comunidades «estamos en el mismo barco, seamos responsables», ha remarcado.

Además, ha insistido en que, por la calle, repite a la ciudadanía las medidas de seguridad a adoptar: guardar metro y medio de distancia, usar mascarillas cuando se está en grupo, y lavarse las manos «el mayor número de veces» posible.

Por otro lado, ha afirmado que él no tiene que presentarse a las elecciones, como Urkullu, y «puede hablar claro», para reprochar al Gobierno de Pedro Sánchez su «excesiva centralización» en la gestión de la pandemia.

Asimismo, ha alabado al lehendakari, del que, según ha asegurado, tiene «una extraordinaria opinión desde hace mucho tiempo». No obstante, ha precisado que esta «opinión favorable se ha acrecentado» durante los 14 domingos en los que los presidentes autonómicos se han reúnido con Sánchez durante el estado de alarma «a una media de cuatro horas y media, que suman 63 horas con Pedro (Sánchez)».

«Hemos compartido los dos (Urkullu y él) los mismos planteamientos y también nuestros partidos en el Parlamento de España», ha apuntado.

Urkullu, por su parte, ha instado a los vascos que viajen a Cantabia a que cumplan todas las medidas de prevención y seguridad. En su mensaje ha recordado también a los fallecidos por el Covid y a aquellas personas que «no tienen opción a la movilidad», cuando Euskadi y Cantabria la recuperan en esta nueva fase.

Asimismo, ha manifestado su reconocimiento y agradecimiento «a toda la sociedad por el compromiso demostrado durante todo el periodo de confinamiento, durante todas las fases del proceso de desescalada».

«Un reconocimiento y agradecimiento especial a todos los trabajadores que han cuidado de nosotros, especialmente a los sanitarios y sociosanitarios, pero también a los que hacen posible que la vida siga adelante y que nosotros podamos gozar de esta vida», ha añadido.

Ha animado, igual que Revilla, a observar las medidas preventivas, especialmente la higiene personal, el distanciamiento físico entre las personas y el uso «indispensable» de las mascarillas cuando no se pueda guardar el distanciamiento, con el fin de evitar que se repitan los efectos de la pandemia, «de un virus que sigue estando entre nosotros».

También ha recordado que las mascarillas han de usarse por quienes compartan viaje en un vehículo, y ha instado a los vascos que vayan a Cantabria «que cumplan todos los requisitos». «Euskadi también estará abierta a la receptividad de los cántabros», ha subrayado.

Asimismo, y en la misma líena que Revilla, ha destacado la colaboración entre Euskadi y Cantabia y ha asegurado que la buena relación «se ha acrecentado» durante las conferencias de presidentes autonómicos, «compartiendo desvelos, la evolución de la pandemia y compartiendo en deseo de que pudiéramos gozar de esta situación».

El encuentro entre ambos presidentes se ha producido después de que esta pasada medianoche hayan entrado en vigor los decretos por los que Euskadi y Cantabria levantan el estado de alarma y entran en la nueva normalidad, por lo que se recupera la movilidad entre estos territorios por acuerdo de sus presidentes.

Urkullu ha obsequiado a Revilla con el libro ‘Kontakizuna’ sobre la historia vasca, de Kirmen Uribe, y el presidente cántabro ha regalado al lehendakari las obras ‘Monte Castillo. La Montaña Sagrada’ y ‘El Beato de Fernando I y doña Sancha’.