Siete parques eólicos, 300 millones de inversión
La Asociación estima que el desembolso para poner en marcha los proyectos aprobados en Cantabria llegarían a esa cifra
La Asociación Eólica de Cantabria ha subrayado que si salen adelante los siete parques que en la actualidad tienen aprobada la declaración de impacto ambiental supondrían una inversión en la comunidad de más de 300 millones de euros en tres años, además de la generación de 400 puestos de trabajo en su construcción y, una vez ejecutados, unos 80 empleos directos e indirectos, además de ingresos de unos 2 millones para los ayuntamientos y juntas vecinales que los acogen.
Así lo ha apuntado, en una entrevista en RNE recogida por Europa Press, el presidente de la Asociación, Agustín Valcarce, quien ha explicado que esos siete parques sumarían aproximadamente unos 80 molinos y supondrían una potencia de 280 megawatios, que se unirían a los 35 mw que ya suman el parque eólico de Soba (Cañoneras), el único en funcionamiento en Cantabria, y el molino experimental de Vestas, ubicado en la cima del monte Cotío de Celada Marlantes (Campoo de Enmedio).
Estos parques con declaración de impacto ambiental favorable son: El Escudo, Bustatur, Somaloma-Las Quemadas, Campo Alto, La Costana, Cuesta Mayor y Alsa.
Con ellos, y el de Soba, se podría abastecer, según ha señalado, el 100 por 100 del consumo doméstico de electricidad de Cantabria y una cuarta parte del total de la comunidad autónoma, lo que supondría «pegar un salto importante» para una región que está «en el furgón de cola» en generación de energía. «Sería un buen comienzo», ha aseverado.
Valcarce ha defendido que «si Cantabria quiere crecer necesita más energía» y ha afirmado que, en estos momentos, la única manera de generarla sin emisiones y a precios asequible es la eólica.
El presidente de la Asociación ha vuelto a lamentar el «retraso» de Cantabria en el desarrollo de parques eólicos, ocupando de los últimos puestos en el ránking nacional y en contraposición a otros territorios como Burgos, que ya va camino de los 90, o Galicia, que tiene 140 parques y más de un centenar de solicitudes.
Ha señalado que esta «sequía» de proyectos se ha «roto un poco» con las declaraciones de impacto ambiental aprobadas para estos siete parques eoólicos.
Sin embargo, ha subrayado que, aun con todos ellos, Cantabria no llegaría ni al 50% de los objetivos que marca el último plan de sostenibilidad energética de la comunidad, que fija en 700 mw las necesidades de energía eólica de la región.
En la entrevista, Valcarce ha considerado «una pena» que vaya a terminar la legislatura sin haberse desatascado la ejecución del parque eólico del Escudo, que prevé la instalación de 25 molinos, y ha confiado en que «se resuelva a la mayor brevedad».
Respecto a la oposición que existe desde algunos colectivos y ciudadanos a la implantación de parques eólicos de Cantabria, Valcarce se ha preguntado si en la comunidad «no se estará exagerando demasiado este rechazo» que, a su juicio, «no es tal» ya que, en su opinión, hay más gente que está a favor del desarrollo eólico que la que no.
«Se está dando mucha voz a quienes se oponen a los proyectos eólicos», ha opinado Valcarce, quien ha señalado que aquellos que se manifiestan en contra de los molinos son «los mismos» protestando en distintos sitios.
Sin embargo, considera que una vez que se vayan implantando parques eólicos en Cantabria, algo en lo que confía, irán cayendo «los bulos» que hay sobre ellos sobre los supuestos perjuicios que generan para el ganado o la salud y que, según ha dicho, «no se han constatado» en ninguno de los 1.400 que hay en toda la geografía española.
Sí ha reconocido que los parques tienen un impacto visual, si bien ha señalado que algunas zonas de Cantabria ya lo sufren con parte de los instalados en Burgos (pues están en el límite entre ambas provincias) y, además, «no reciben nada a cambio».