Tres investigados por incendios forestales que quemaron 4,85 hectáreas Valderredible y Molledo
La Guardia Civil ha instruido diligencias en calidad de investigados a un hombre como presunto autor de un incendio forestal en Ruerrero (Valderredible) y a otro hombre y una mujer, en relación con otro incendio en un monte de la localidad de San Martín de Quevedo (Molledo).
Entre los dos incendios ardieron 4,85 hectáreas, equivalentes a unos siete campos de fútbol, de monte bajo y matorral.
Para la extinción del ocurrido en Ruerrero, además de Bomberos Forestales, tuvieron que intervenir efectivos de la Brigada de Refuerzo en Incendios (BRIF) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, así como un helicóptero.
El pasado 11 de abril se detectó en la zona del monte ‘Hoyales’ de Ruerrero un incendio forestal, que afectó a 11 fincas particulares y parte del citado monte de utilidad pública.
La investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil determinó que el inicio del incendio tuvo lugar en una de las fincas afectadas, donde se había realizado una quema de restos de poda.
Al parecer, la citada quema no quedó del todo apagada, lo que motivó el inicio del incendio. El 8 de mayo se ha investigado al presunto autor por una imprudencia grave.
Por otra parte, el 6 de febrero se produjo un incendio forestal en el paraje conocido como Peña Arcenal, en la localidad de San Martín de Quevedo donde ardieron 7.300 metros cuadrados de monte bajo y matorral en monte de utilidad pública. Este día estaba prohibido realizar fuego debido a condiciones meteorológicas adversas.
En una zona próxima al lugar del incendio, efectivos de seguridad privada observaron a un vehículo que circulaba por una pista forestal, que se detuvo en un determinado lugar, para minutos después continuar la marcha. Aproximadamente una hora más tarde vieron, que, de forma espontánea, comenzaba un incendio en el lugar donde se había parado el vehículo. El fuego tuvo que ser sofocado por bomberos forestales.
El SEPRONA determinó la existencia de varios focos de inicio del incendio y dedujo que se habían utilizado dispositivos de retardo. Estos focos coincidían con el lugar donde se detuvo el vehículo.
Tras diversas indagaciones se logró averiguar la identidad de los presuntos autores del incendio, que fueron localizados el 23 de abril y 7 de mayo, contra los que se han instruido diligencias en calidad de investigados por un supuesto delito de incendio forestal.