Concentración y falta de conductores, las claves del transporte por carretera
Cada vez hay menos empresas, aunque más fuertes
Con casi cinco mil camiones, Cantabria es una potencia en el sector del transporte por carretera, pero no dejan de registrarse bajas. La misma concentración que se produce en otros sectores está dando lugar a empresas más fuertes, que podrían crecer aún más si resolviesen el problema de falta de conductores que padecen. El mercado local está más activo que nunca, frente al relativo estancamiento del nacional, y permite suponer que 2024 va a ser un buen año para el transporte, en parte por el crecimiento de los movimientos en el Puerto de Santander.
En 2010 operaban en Cantabria algo más de mil empresas de transportes por carretera, sin incluir los autónomos, propietarios por lo general de un solo vehículo, el que conducen.
Tradicionalmente, el transporte ha tenido un peso muy relevante en Cantabria, una región que solo supone el 1,2% del PIB nacional pero concentra el 4% de los camiones del país. No es casualidad, por tanto, que estén asentadas en ella algunas de las mayores compañías nacionales del sector.
Pero nadie se libra de las concentraciones y el número de empresas operativas en Cantabria en esta década se ha reducido drásticamente. Ahora son 259, con unas ventas de 985 millones de euros en 2022 (4,93 millones de media) y unos beneficios promedios de 106.600 euros.
Si en ese mapa se incluyen los autónomos, a cierre de 2022 había en Cantabria 1.767 empresas de transporte por carretera. Pero el número no deja de reducirse. Tanto que un año después (diciembre de 2023), el censo se había quedado en 1.641, de las cuales 1.222 eran de vehículos pesados (un 5,3% menos) y 419, de vehículos ligeros (-12,2%). Llama la atención la fuerte caída de estas últimas teniendo en cuenta que las furgonetas hacen el reparto de última milla y que la vorágine de compras online no para de crecer.
El número de camiones también se reduce pero en menor proporción que las empresas. Los camiones con base en la región han pasado de 4.913 en 2022 a 4.815 en 2023, un 2% menos.
“Esta menor disminución de vehículos que de empresas responde a esa tendencia a la concentración que vive el sector. Entre los pequeños, estas integraciones muchas veces son por pura supervivencia”, explica Andrés R. Tárano, presidente de la Agrupación Empresarial de Transportes de Cantabria (AETRAC).
Aún tras años de concentración, el 51% de las empresas españolas de transporte por carretera siguen contando con un único vehículo. Otro 35% tienen entre uno y cinco y solo el 2,6% dispone de más de 20 camiones.
En Cantabria la situación es bastante distinta: “Prácticamente, el 50% de las empresas supera los tres vehículos. Hace no hace muchos años, solo eran el 5%”, subraya el presidente de AETRAC.
El tamaño influye en prácticamente todos los ámbitos del negocio: acceso a financiación, internacionalización, mejor formación de los empleados y mayor capacidad de atracción y retención del talento profesional.
Por tanto, aunque cada vez sea menor número de empresas, las existentes están más preparadas para enfrentarse a los desafíos, algo que se refleja en sus balances. En 2022, XPO superó los 507 millones de euros de facturación, un 12% más que un año atrás; Transportes Arniella facturó más de 53,7 millones de euros (un 11% más), y el mismo porcentaje creció Tramesa, que alcanzó los 38,7 millones de euros.
Crecimiento más lento
En 2023 la facturación del sector en Cantabria creció un 4,4%, y en el primer trimestre de este año se ha disparado un 22,7%, pero es un periodo demasiado breve para sacar conclusiones.
Lo único seguro es que estas cifras están por encima de la media nacional. Ya en 2023 el movimiento de mercancías por carretera en el conjunto del Estado apenas creció. Según la Encuesta Permanente del Ministerio de Transportes, se transportaron 1.602 millones de toneladas, con un incremento del 0,9% sobre el año anterior. Un frenazo que se achacó a un descenso del consumo.
Sin embargo, creció sensiblemente la facturación, hasta alcanzar los 16.650 millones de euros, entre transporte nacional (13.065 millones) e internacional (3.685 millones), un 4% más que el año anterior.
Si crecen las ventas pero no los movimientos de mercancías es porque en que los precios del transporte han mejorado y los rendimientos también, pero esa teoría resulta engañosa, porque puede ser consecuencia del precio de los inputs, especialmente el combustible. Afortunadamente para los transportistas, las cláusulas de revisión automática del gasóleo por fin se están cumpliendo. “Se ha creado una cultura en los transportistas y en los cargadores por la que si sube el gasóleo, se repercute, pero si baja, se repercute también”, explica el presidente de AETRAC, que añade que “es importante porque, de no ser así, causa mucha distorsión, ya que, dentro de la estructura de costes, el combustible supera incluso al capítulo de personal”.
Los estudios prevén un buen 2024 para el sector, impulsado por una mejora en la actividad económica en toda Europa. La desaceleración de la inflación, un crecimiento real de los salarios y del empleo deberían estimular un aumento en el consumo, incrementando la demanda de transporte por carretera. Sin embargo, esto no se ha reflejado en el primer trimestre del año, según datos del Ministerio de Transportes, salvo en Cantabria.
Durante los tres primeros meses de 2024, el transporte por carretera de España ha movido un 5,6% menos toneladas que un año atrás. La caída ha sido mayor en el transporte nacional (-6%) que en el internacional (-0,75%), sostenido por el empuje de las exportaciones, que han aumentado un 4,6%.
90 millones al año en sanciones
El Plan de Inspección del Transporte realizado por el Estado y las comunidades autónomas levantó más de 153.000 expedientes de infracción el año pasado, lo que generó una recaudación de más de 90 millones de euros en multas.
Las infracciones más habituales son por los tiempos de conducción y descanso, con 71.030 expedientes, aunque la mayoría (el 74%) son leves.
Por manipulación del tacógrafo se abrieron 104 expedientes y en materia de limitador de velocidad se impusieron 560 sanciones.
Se comprobaron más de 4,1 millones de jornadas de trabajo, una cifra muy similar a la de 2022, pero se detectaron un 25% menos de infracciones que entonces.
En transportes sin autorización se detectaron 8.698 infracciones y en materia de excesos de pesos hubo 21.176 expedientes, el 70% de ellos por irregularidades leves.
A finales de este año, el Ministerio de Transportes pondrá en marcha el nuevo reglamento europeo que establece la fórmula común para calcular la clasificación de riesgos de las empresas de transporte. Para ello se tendrán en cuenta el histórico sobre el número, gravedad y frecuencia de las infracciones impuestas a cada empresa transportista, así como los resultados de los controles cuando no se haya detectado ninguna infracción, y si una empresa de transporte por carretera ha estado utilizando el tacógrafo inteligente.
El objetivo es contribuir a la armonización de las prácticas de control en toda la Unión Europea, para garantizar que todos los conductores y empresas de transporte reciban el mismo trato en cuanto a controles y sanciones.
No hay conductores
El problema más acuciante del sector, no obstante, es la escasez de conductores. Un déficit que a nivel nacional se calcula ya en unos 20.000 profesionales, y que lleva tiempo limitando la oferta de transporte.
Tárano confirma que “está afectando mucho al desarrollo de las empresas de la región” y destaca que esta escasez provoca “que haya camiones parados en las empresas y una mayor carga de trabajo para los conductores”. Apunta también que puede “provocar retrasos en las entregas y, por tanto, afectar a la satisfacción del cliente y la reputación de las empresas; o incluso provocar una mayor dificultad para adaptarse a los cambios”.
Por ello, considera que es necesario favorecer la incorporación de conductores “mejorando muchas cosas, no solo aspectos económicos, sino también condiciones sociales, fundamentalmente de conciliación familiar y de seguridad, ya que siguen faltando zonas de aparcamientos para que los chóferes puedan realizar sus descansos”.
A la carencia de profesionales se suman otros retos, como los medioambientales. Debido a que el transporte por carretera es responsable de un cuarto de las emisiones de gases de efecto invernadero, la Unión Europea, se ha fijado el objetivo de lograr la neutralidad climática para el año 2050. “La UE ha establecido unos criterios muy exigentes de descarbonización y los transportistas tendrán que adaptarse a ellos”, da por sentado Tárano.
20 millones para incentivar el transporte marítimo de camiones
Incluyen varios trayectos desde Santander
El Ministerio de Transportes ha publicado la tercera convocatoria de incentivos marítimos, dotada con 20 millones de euros. Una iniciativa financiada con fondos europeos que busca fomentar que el transporte de mercancías por carretera suba los camiones a los buques en sus desplazamientos por la Unión Europea. Es decir, que incluyan la vía marítima en sus trayectos internacionales dentro de Europa.
Para optar a los incentivos, los potenciales beneficiarios deberán utilizar alguna de las rutas operadas por las navieras colaboradoras del programa, en lugar de hacerlo por carretera.
Esta convocatoria subvencionará los trayectos marítimos internacionales que se realicen entre el 8 de mayo y el 31 de marzo de 2025 entre los puertos de Santander, Bilbao, Barcelona, Sagunto, Valencia y Vigo con destino a otros puertos de la UE en Bélgica, Francia, Irlanda e Italia. Y es que, para ser elegibles, las rutas marítimas deben tener una alternativa por carretera, salvo en el caso de Irlanda, como origen o destino desde la España peninsular.
En esta convocatoria se han actualizado los cálculos de las ayudas para tener en cuenta las mejoras en materia de sostenibilidad que han puesto en marcha las cinco navieras colaboradoras (Britanny Ferries Bilbao, CLdN Ro-Ro, Finnlines, Flota Suardiaz y Grimaldi Euromed), que van desde cambios en las rutas, para hacerlas más directas, con el consiguiente ahorro de combustible; hasta la sustitución de los buques por otros menos contaminantes.
Un parque envejecido
Muchos vehículos en circulación tienen demasiados años de antigüedad, lo que los hace más contaminantes. España destaca negativamente, ya que posee uno de los parques automovilísticos más envejecidos de Europa, con una edad promedio de los vehículos que supera los 12 años.
La solución a este problema es la renovación, pero el presidente de AETRAC no cree que el vehículo eléctrico sea la respuesta: “Este tipo de vehículos son más caros, llevan en torno a 4.000 kilos más de peso por sus baterías y no permiten realizar servicios de largo recorrido, por lo que, aunque pueden ser una solución para corto recorrido en empresas con grandes flotas, no los son para las pequeñas empresas, que son la mayoría del sector, o para viajes de largo recorrido”.
Considera, en cambio, que los biocombustibles pueden ser una de las opciones de descarbonización, ya que se pueden utilizar en los vehículos existentes y ayudan a reducir emisiones. También el hidrógeno verde, una prometedora alternativa libre de carbono a estos combustibles altamente emisores.
La plataforma de internet Goodbuy abre un centro logístico en Tanos
La compañía de venta por internet Goodbuy Iberia, con sede en Torrelavega, ha abierto en la comunidad autónoma el que será su principal centro logístico. Está preparado para absorber la mayor parte de su operativa, que hasta ahora se realizaba exclusivamente en Valencia. Goodbay es una marketplace creada por Israel Casado, especializada en la comercialización, posicionamiento y distribución de productos.
La nave desde la que saldrán cada día dos centenares de pedidos hacia su destino final se encuentra en una ubicación estratégica, el Polígono Industrial de Tanos-Viérnoles. Un lugar de fácil acceso para el transporte y la descarga de mercancía, bien conectado con la autovía A-67 y la Carretera Nacional N-611, el puerto y el aeropuerto de Santander, además de varias estaciones de tren.
Goodbuy cuenta allí con una superficie construida de 2.000 m², que le permite almacenar unos 1.000 palets de mercancías provenientes de España, Francia y China.
Gracias a estas instalaciones, la compañía cántabra es capaz de sacar una media de 200 pedidos diarios que van a destinos de todo el país, Portugal, Francia e Italia.
Con esta nave, la compañía torrelaveguense podrá mejorar su propia logística y continuar con el crecimiento, que avanza a un ritmo del 35% en lo que va de año, con 7.778 enviadas en el primer trimestre frente a las 5.707 del 2023.
Digitalización
Otro reto para el sector es la digitalización. Por un lado, por la inminente llegada del tacógrafo de segunda generación para prácticamente cualquier vehículo que haga transporte internacional, lo que afecta a una gran parte de la flota española, compuesta por 130.000 camiones y 10.000 autobuses.
Este nuevo dispositivo trae novedades para aumentar la seguridad y excluir las posibilidades de fraude. Con él, los transportistas no necesitarán parar el vehículo al atravesar la frontera, ya que va conectado a varios sistemas de navegación por satélite y registrará de manera automática la entrada en un otro país. También permite confirmar que se está llevando a cabo alguna operación de carga o descarga y se conecta con los sistemas de transporte inteligentes, por lo que los datos generados se podrán descargar en un dispositivo externo (la empresa transportista o una autoridad) sin necesidad de parar el camión.
A pesar de que la gran mayoría de vehículos tienen que realizar su instalación antes de que acabe este año (los demás tienen seis meses más), Tárano lamenta que no se esté gestionando bien: “El Ministerio de Transportes dispone de 110 millones de euros de fondos Next Generation para la digitalización del sector, de los que 90 siguen sin ser solicitados, a pesar de que pueden destinarse a soluciones digitales como la implantación del documento de control electrónico, la actualización de los sistemas de gestión de las empresas, la implantación de sistemas ERP y la instalación de este nuevo tacógrafo inteligente de segunda generación”.
En el área de digitalización, queda pendiente la implantación del documento electrónico de control del transporte que, en principio, iba a ser obligatorio desde el 1 de septiembre de este año, pero finalmente se ha pospuesto hasta inicios de 2026.
“Va a servir para hacer bastante más transparente la contratación del transporte, algo muy importante si se tiene en cuenta que, a veces, desde que la mercancía sale de una fábrica hasta que llega a destino intervienen cuatro o cinco operadores, por lo que se necesita dar transparencia y trazabilidad”, apostillan desde AETRAC.
Dada la complejidad técnica que se le exige a este documento –la carta de porte–, esta prórroga puede resultar positiva, ya que dará tiempo al sector para adaptarse al uso de las aplicaciones existentes.
María Quintana
