El obispo de Santander afronta con ‘preocupación y esperanza’ la escasez de vocaciones
El obispo de Santander, Arturo Ros, afronta con «preocupación y esperanza» la escasez de vocaciones en la Diócesis, con cuatro seminaristas formándose actualmente, y tras el «desierto vocacional de hace años».
«Tenemos pocas vocaciones pero muy buenas» y además, «va habiendo brotes verdes; tenemos expectativas», ha afirmado el prelado este miércoles a preguntas de los medios, en una rueda de prensa con motivo del día de la Iglesia Diocesana, que se celebra este domingo.
Una jornada en la que ha llamado a la reflexión y a la caridad con motivo del día de la Iglesia Diocesana, que se celebra este domingo, y en la que el obispo ve dos realidades, una a nivel interno, «los que vivimos este compromiso permanente, diario», de «tener conciencia de la responsabilidad que tenemos en nuestras manos por servir a la Iglesia», y otra hacia a el exterior, «para hacer consciente la sociedad en general de este compromiso y de la necesidad y del servicio que la Iglesia como institución que la forman personas presta diariamente para el bien común, para el servicio en todos los sentidos».
«Por tanto, esa primera conciencia y al mismo tiempo todos, dentro y fuera, los que están y los que vienen ocasionalmente, ser conscientes de que nos necesitamos a todos, en primer lugar por hacer posible ese servicio todos los días, de una forma gratuita, generosa, desinteresada, alegre y al mismo tiempo que entre todos hemos de cuidarlo, cuidar a las personas, cuidar las instituciones, cuidar los edificios. Y también supone una llamada a la caridad para aportar económicamente lo que buenamente se pueda para que juntos podamos seguir haciendo el camino que vamos recorriendo en la historia», ha explicado.
Por su parte, la delegada diocesana de Apostolado Seglar, Carmen González, ha explicado que uno de los principales trabajos este curso es unificar las líneas de actuación de la Diócesis para que sean comunes.
Ha indicado que este sábado tendrá lugar el encuentro ‘Evangelizados para evangelizar’ para la conversión pastoral, ha anunciado que se creará una Escuela de Acompañamiento y una Semana Social con diferentes temáticas.
Se trata «de mejorar el trabajo en red para mejorar la acción caritativa» porque Cáritas Diocesana trabaja en red pero es necesario que haya más gente trabajando «con los más desfavorecidos y necesitados», ha resumido.
LA DIÓCESIS EN CIFRAS
La Diócesis de Santander tiene en estos momentos 213 sacerdotes, 526 religiosos y 141 monjas y monjes de clausura. Además dispone de 616 parroquias, 12 monasterios, 53 bienes de Interés Cultural y está afrontando 12 proyectos de construcción y rehabilitación.
Por lo que se refiere a la actividad de la Iglesia en 2023, se han celebrado 1.740 bautizos; 1.404 primeras comuniones; 318 confirmaciones y 350 matrimonios. En cuanto a la actividad educativa, hay 37 centros concertados con 18-290 alumnos y 200 trabajadores, mientras que el personal docente asciende a 1.594.
Dentro de la actividad asistencial, la Diócesis ha asistido a 16.172 personas en 81 centros.
En concreto, cuenta con 57 centros para mitigar la pobreza, 13 casas para ancianos, enfermos crónicos y personas con discapacidad, y tres centros de menores con 142 personas atendidas. En su centro de rehabilitación para drogodependientes se ha atendido a 5.157 personas y a 144 en los dos para la promoción de la mujer y para víctimas de violencia. Los tres centros para la defensa de la vida y la familia han atendido a 385 personas y los dos para promover el trabajo, a 97.
Además, hay 363 voluntarios en Cáritas que han prestado asistencia a 6.085 personas; y 42 voluntarios en Manos Unidas. Y los 16 proyectos de cooperación al desarrollo en el mundo tienen 8.000 beneficiarios directos.
La Diócesis de Santander ingresó el año pasado 13,72 millones de euros y sus gastos ascendieron a 13,28.