Unicaja prevé que el PIB de Cantabria crezca un 1,8% en 2025 y el empleo un 1,6%

Unicaja prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) de Cantabria crezca un 1,8% a cierre de este 2024 y se mantenga la misma tasa en 2025, año para el que estima un aumento del empleo del 1,6% y una tasa de paro del 7,4%, frente al 11% a nivel nacional.

Así lo recoge el último informe ‘Previsiones Económicas de Cantabria’, elaborado por Analistas Económicos de Andalucía, sociedad de estudios del Grupo Unicaja, y dado a conocer este martes.

Las previsiones realizadas por la sociedad de estudios del Grupo Unicaja apuntan a que, en el conjunto de 2024, el Producto Interior Bruto (PIB) de Cantabria registraría un crecimiento del 1,8%. Una tasa similar a la estimada hace seis meses, ya que, aunque el año comenzó con un crecimiento algo mayor de lo previsto, se ha visto moderado en el segundo trimestre. Este incremento se apoyaría principalmente en el sector servicios y en el consumo privado.

Asimismo, se estima que el número de ocupados crezca un 2,5% en el promedio de 2024, sustentándose la creación de empleo en los sectores no agrarios, especialmente los servicios.

Por su parte, la cifra de parados podría reducirse algo más del 3%, lo que situaría la tasa de paro en el promedio del año en el 7,7% (cuato décimas inferior a la de 2023).

En cuanto a 2025, las estimaciones sitúan la tasa de crecimiento del PIB nuevamente el 1,8%, en tanto que el número de ocupados podría crecer un 1,6%, estimándose una tasa de paro del 7,4%. Las tensiones comerciales y geopolíticas continúan representando una de las principales incertidumbres para las proyecciones de crecimiento, apunta Unicaja.

Según los datos de la Contabilidad Trimestral, publicados por el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), el crecimiento de la economía regional se ha moderado, registrándose un aumento del PIB del 0,2% en el segundo trimestre de 2024 (0,8% en España), frente al 0,6% en los tres primeros meses del año. En términos interanuales, el crecimiento del PIB se situó en el 1,2% entre abril y junio.

Desde el lado de la demanda, se aprecia una recuperación en el gasto en consumo de los hogares. Las ventas minoristas crecieron hasta julio algo más de un 3%, más que la media española y que en el mismo periodo de 2023, mejorando también la producción industrial de bienes de consumo.

Sin embargo, la producción industrial de bienes de equipo apuntaría a una trayectoria desfavorable de la inversión en maquinaria y bienes de equipo.

En cuanto a la inversión residencial, las compraventas de viviendas aumentaron un 3,6% entre enero y junio en términos interanuales, frente al descenso registrado en el conjunto de España, al tiempo que los precios continúan creciendo a un ritmo «significativo».

Respecto a la demanda exterior, el valor de las exportaciones de bienes se ha situado en 1.829,8 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un crecimiento del 3% en términos interanuales (-2,4% en España). Este aumento se ha debido fundamentalmente a la subida en el valor exportado de bienes de equipo (especialmente equipos generadores de fuerza) y de semimanufacturas (hierro y acero), productos que suponen casi dos tercios de las exportaciones cántabras.

Por el lado de la oferta, el aumento trimestral del PIB en la primera mitad del año se ha debido a la aportación de la construcción y los servicios. En el segundo trimestre, el crecimiento se ha sustentado en el sector servicios y, en menor medida, en la construcción. Dentro del sector servicios, destaca el aumento en las actividades financieras, inmobiliarias y profesionales, así como en comercio, transporte, hostelería e información.

En lo que se refiere al mercado de trabajo, el empleo ha seguido creciendo en la primera mitad de 2024, aunque los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) reflejan un ritmo de crecimiento más moderado en el segundo trimestre.

Sin embargo, los datos de afiliación a la Seguridad Social muestran un incremento algo más intenso en el tercer trimestre, que se mantiene por debajo de la media española. Según la EPA, el número de ocupados en el segundo trimestre se situó en 259.500, lo que supone un descenso de 3.000 ocupados con relación al primer trimestre, que se ha debido principalmente a la disminución en el sector servicios, especialmente de mercado, y, en menor medida, en la construcción.

En términos interanuales, el número de ocupados ha aumentado un 1,3% (2% en España), por el crecimiento en los sectores no agrarios, especialmente industria y servicios de no mercado.

En paralelo, el número de parados se ha incrementado, ya que la población activa ha registrado un aumento significativo, situándose la tasa de paro en el 8,5% (11,3% en España).