Las obras del Alisal amplían la ciudad y crearán más de 1.000 viviendas
La urbanización de esta ampliación cuesta unos diez millones de euros y estará lista para el verano
La ampliación del Alisal es una de las operaciones urbanísticas más importante de la ciudad en los últimos años, ya que en sus 170.000 m2 se construirán más de mil viviendas, de las que casi 300 serán de protección oficial. Aunque no estarán concluidas hasta 2027, más de 8.000 personas se han registrado ya para optar a ellas. Por el momento, la urbanización de la zona, en la que se invierten diez millones de euros, avanza deprisa y podría estar concluida en verano.
Máquinas y operarios han tomado desde hace meses la última parte virgen del Alisal, lo que popularmente ha pasado a identificarse como Nuevo Alisal, ya que se trata de la prolongación de uno de los barrios que ha permitido a la capital cántabra crecer durante las últimas décadas. La nueva zona enlazará la ciudad con Adarzo (Peñacastillo), extendiendo el casco urbano hacia el oeste.
Lo que hasta hace escasos meses era una gran pradería situada frente al Centro Comercial de El Alisal es hoy un espacio casi urbanizado, con importantes movimientos de tierra y viales muy avanzados que han dejado perfectamente delimitadas las manzanas.
Estos trabajos, junto a la instalación de las redes de saneamiento, energía, telecomunicaciones, aguas y semáforos tienen un presupuesto de diez millones de euros.
Estas actuaciones también supondrán una mejora para el resto de los vecinos de la zona, ya que han completado la calle Alfredo Kraus (la que sube desde el tanatorio de La Montañesa), que hasta ahora finalizaba en un fondo de saco y se ha conectado con la calle Adarzo, que se ha ensanchado para permitir la instalación de aceras en ambos márgenes.
Este proyecto lo impulsa una Junta de Compensación de propietarios en la que la Sareb tiene un papel protagonista, ya que es propietaria del 55% de los terrenos.
La constructora Copsesa es la encargada de urbanizar los más de 170.000 metros cuadrados de esta nueva zona sobre la que se podrán levantar más de mil viviendas, de las que casi 300 estarán promovidas por el Ayuntamiento de Santander y serán de protección oficial (VPO), así como espacios comerciales, deportivos, educativos y sociosanitarios.
Viviendas públicas y privadas
La mayor parte de las viviendas que se construyan en el Nuevo Alisal seguirán el modelo de manzana cerrada: bloques que ocupan toda la parcela con espacios interiores.
El Ayuntamiento espera que las VPO empiecen a levantarse el próximo otoño y estiman que las obras durarán dos años, por lo que podrían estar concluidas a finales de 2026 y ser entregadas en la primavera de 2027.
Serán en total 282 pisos distribuidos en seis bloques de edificios con espacios interiores. Todas las viviendas contarán con una plaza de garaje y un trastero vinculado, y la mayoría estarán compuestas por salón, cocina, dos o tres dormitorios, cuarto de baño y aseo.
De estas promociones de VPO, 177 viviendas se destinarán a la venta y las otras 115 al alquiler (100 de ellas con opción a compra). A las dos opciones se accederá mediante sorteo, al que se han inscrito más de 8.000 ciudadanos.
Una vez revisadas las solicitudes y publicadas las listas, la previsión es celebrar el primero de los sorteos el próximo mes de mayo. En 2025 se sortearán dos bloques más y en 2026 los dos restantes, para ampliar las posibilidades de los vecinos interesados.
Además de estos bloques, existe otra gran zona destinada a las viviendas privadas, que no estarán dispuestas en forma de manzanas cerradas, como las anteriores, sino en bloques individuales. Estas promociones se ubicarán en la zona más próxima a la Calle Alfredo Kraus y a la Calle Adarzo y entre ellas habrá un parque público.
María Quintana