Cantabria será centro logístico de Covirán para la zona norte

Tras el acuerdo de fusión alcanzado con Alcosant, el rótulo de Covirán, la gran cooperativa andaluza, se puede encontrar ya en los rincones más apartados de Cantabria, pero la transformación de la cadena detallista no ha hecho nada más que empezar y ante los socios de la antigua Alcosant se abre ahora un periodo de adaptación a las pautas marcadas por el nuevo grupo.
Uno de los primeros pasos será la remodelación de muchos de los locales que albergan a estos pequeños comercios de alimentación. Tendrán que modernizar su imagen y aprovechar mejor el espacio disponible para dar cabida a nuevos productos y secciones más definidas. “Nuestro formato de negocio –explica el presidente de Covirán, Antonio Robles– está entre los 200 y 400 metros cuadrados. Evidentemente, en Cantabria no tenemos esa media y queremos hacer una transformación de los socios para orientarlos hacia ese tipo de negocio”.
La media de los establecimientos de la antigua Alcosant se sitúa en 150 metros cuadrados. Los responsables de Covirán han iniciado conversaciones con la Administración cántabra con el fin de lograr ayudas para que los pequeños comerciantes de este sector de la alimentación puedan acometer la modernización de sus establecimientos. Además, el Grupo dispone de técnicos para asesorar a sus socios en el modo de llevar a cabo las reformas y hacer más atractivo el negocio. “En los territorios en que estamos asentados –señala el director general de Covirán, Antonio Salas– la segunda generación se está incorporando al proyecto porque estamos consiguiendo que los padres den el primer paso y lleven a cabo unas reformas que hacen atractivo para los hijos continuar con el negocio”.

La apuesta por Cantabria

Con sus 1.600 puntos de venta y una facturación que rondará en el 2003 los 300 millones de euros, Covirán se ha convertido en una de las mayores empresas de distribución que operan en España. Su mayor implantación se encuentra en Andalucía, donde está presente en cerca del 50% de las localidades.
En los últimos dos años Covirán ha iniciado un proceso de expansión que ha llevado a esta cooperativa andaluza hasta el norte de España. El pasado mes de mayo llegaba a un acuerdo con la cooperativa Secuc, de San Sebastián, para integrar a sus socios en el Grupo, y en el mes de julio se hacía público el acuerdo de fusión con la cooperativa cántabra Alcosant, que aporta 271 puntos de venta, repartidos por toda la geografía de Cantabria, con la excepción de Liébana.
Asturias, la zona norte de Castilla, Navarra, Aragón y La Rioja son también zonas sobre las que el grupo andaluz proyecta sus planes de crecimiento, mientras que cuenta ya con presencia en Extremadura y Murcia. Pero el impulso de expansión no se agota en el territorio nacional y países vecinos como Portugal y Marruecos están siendo sondeados para analizar las posibilidades de incorporar algún grupo local a este gran movimiento cooperativo. “Si lo hacemos bien y no nos equivocamos –subraya Antonio Salas–, en diez años Covirán será un grupo potente y a tener en cuenta en la distribución nacional”.
En sus planes para el norte de España, Cantabria está llamada a jugar un papel de especial importancia como centro logístico de toda la zona. Covirán cuenta actualmente con 14 plataformas de distribución, doce de ellas en Andalucía, una en Santander y otra en San Sebastián, y dos plataformas nodrizas situadas en Armilla (Granada) y en Sevilla, desde las que se abastece a las zonas oriental y occidental de Andalucía respectivamente. En este esquema, Cantabria estaría llamada a convertirse en la plataforma nodriza de los establecimientos situados en la Cornisa Cantábrica y en la zona norte de Castilla.