El parón de la obra pública preocupa a los excavadores
Como era previsible, la frenética actividad de la obra pública en el periodo preelectoral ha dado paso a un súbito parón que llena de inquietud a las empresas del sector. La Asociación de Excavadores de Cantabria, Aexca, que celebró recientemente su asamblea anual, estima que la actividad de sus asociados ha descendido cerca de un 30% y señala que en estos momentos existen bastantes máquinas paradas en la región.
La preocupación de los excavadores se acentúa ante la consecuencias que para el sector inmobiliario está teniendo la demora en la aprobación del Plan de Protección del Litoral. La suspensión de la concesión de nuevas licencias de obra y la paralización de los planes urbanísticos de los municipios afectados en tanto no se apruebe la ley, puede empezar a tener efectos muy negativos para la actividad de estas empresas, que hasta ahora habían estado volcadas en la abundante obra pública puesta en marcha por la Administración regional y el Ayuntamiento de Santander en los dos últimos años de cara a las elecciones.
Demora en los pagos
En su condición de subcontratistas, las empresas asociadas a Aexca han vuelto a poner énfasis en uno de los grandes problemas del sector: la tardanza de las empresas titulares de las obras en abonarles su trabajo, lo que se traduce en unos elevados costes financieros. A pesar de la existencia de una directiva comunitaria en la que desde el año 2000 se establece que el pago a los subcontratistas se debe efectuar en 60 días, la tardanza del Gobierno español en trasponer esta norma a nuestro derecho permite a las empresas contratistas continuar pagando en plazos que oscilan entre 150 y 220 días. “Los contratistas están jugando con nuestro trabajo y con nuestro dinero, porque nosotros somos al final los que realizamos la obra y la cobramos cuando ellos quieren”, afirma el presidente de AEXCA, Gabriel González. Para remediar esta situación, los subcontratistas esperan que el nuevo Gobierno regional haga extensiva a todas las licitaciones la obligación, aplicada de forma experimental en la obra Puente El Arrudo-Puentenansa, de que la empresa contratista inscriba en un libro de registro a todos los subcontratistas que participen en la obra, y se comprometa a efectuar el pago en 90 días.
Aexca ha mostrado una moderada satisfacción por el mayor protagonismo concedido a las empresas regionales en la obra pública que el Estado realiza en Cantabria. Sus críticas han ido esta vez dirigidas al “egoísmo” mostrado por algunas empresas regionales, que han preferido equiparse con su propia maquinaria para ejecutar las excavaciones en vez de contar con las empresas subcontratistas. “Hemos llegado a un punto –advierte el presidente de Aexca– que muchos socios nos dicen que prefieren que las obras sean adjudicadas a las empresas nacionales porque no desplazan su maquinaria y son las que en realidad nos están dando trabajo”.
Sin noticia de los depósitos de inertes
Otra de las quejas recurrentes en el sector es la inexistencia de depósitos donde verter la tierra y los escombros que se generan en el vaciado de los solares. El plan regional de depósitos de inertes anunciado por la Consejería de Medio Ambiente hace un año creó unas expectativas que se han vuelto a ver defraudadas, una vez más.
Los excavadores denuncian la lentitud y descoordinación del proceso, del que a fecha de hoy sólo saben que, de las doce ubicaciones posibles propuestas por la consultora que ha realizado el trabajo de campo, cuatro han sido rechazadas por Medio Ambiente y otras cuatro ni siquiera han sido visitadas aún por los técnicos de la Consejería. Además, algunos ayuntamientos han recogido ya en sus planes de urbanismo emplazamientos para los inertes que no han sido tenidos en cuenta a la hora de elaborar el mapa de depósitos. “Aunque la solución está bien encaminada, señala Gabriel González, pensamos que el tema no se ha llevado con la celeridad que debiera ni se han puesto las ganas suficientes”. Desde Aexca se espera que el nuevo titular de Medio Ambiente resuelva definitivamente este problema, convertido ya en crónico.