EvoBus también fabricará los chasis de autobuses en Sámano
Tras varios meses de pruebas y una inversión cercana a los 2.500 millones de pesetas, EvoBus, la filial de Daimler-Chrysler para la fabricación de autobuses, lanzará al mercado europeo, a comienzos del próximo año, los primeros chasis de autocar Mercedes Benz fabricados en su planta de Sámano (Castro Urdiales). Veinte operarios –parte de los cuales fueron enviados a la planta de Mannheim (Alemania) para formarse allí en las técnicas de construcción del nuevo producto–, trabajan en la puesta a punto de este modelo de chasis del que se espera construir cerca de 700 unidades al año y que irá destinado a diversas empresas carroceras donde se hará el ensamblaje final del vehículo.
Cuando la fábrica comience su producción en serie, la plantilla de IBC 2000, que es el nombre que se ha dado a la filial de EvoBus que se encargará de producir los chasis, contratará a 35 operarios más e irá aumentando hasta alcanzar los 70 trabajadores. Este puede ser el primer paso para que Daimler-Chrysler, la multinacional propietaria de EvoBus, centralice en la planta de Sámano una línea de fabricación que ahora está asentada en Mannheim.
La consolidación de la fábrica de Sámano
La decisión de confiar a la planta de Castro Urdiales esta nueva línea de fabricación viene a confirmar la apuesta por la supervivencia de la empresa que en su día hizo la multinacional alemana. El desembarco del primer fabricante europeo de autobuses en Setra, que es como entonces se denominaba, rescató a la compañía de una crisis que amenazaba con hacerla desaparecer y que, curiosamente, fue provocada por su mismo salvador. A comienzos de los 90, Mercedes adquirió la compañía alemana que suministraba la tecnología a Setra y a partir de ese momento impidió que la empresa cántabra exportase a mercados donde podía competir con sus propias fabricaciones. Los autobuses que se montaban en la planta española tuvieron que concentrarse en el mercado nacional en un momento en el que la demanda de autobuses había caído drásticamente y la empresa de Sámano pronto entró en suspensión de pagos.
Polo de atracción industrial
Casi tres años después de su incorporación al grupo Daimler Benz –convertida en Daimler-Chrysler tras la fusión con la marca norteamericana en noviembre de 1998–, ha demostrado ser una de las más rentables del grupo y tras la ampliación de sus actividades se convertirá en una de las más importantes industrias de la región, con una plantilla que sumará más de 1.200 trabajadores y una facturación que en 1999 superó los 14.000 millones de pesetas.
La planta hasta ahora sólo construía las carrocerías autoportantes que se montaban sobre los chasis importados y que salen al mercado con las marcas Setra y Mercedes. Unicamente estaba dirigida para el mercado peninsular y era una de las más pequeñas de la multinacional germanoamericana –que cuenta con otras cuatro fábricas de autobuses en Europa (dos en Alemania, una en Francia y otra en Turquía)–. Pero una muestra del interés que ha despertado en la compañía es la reciente presencia en Cantabria de los consejeros del grupo, que manifestaron su satisfacción por su inversión en la región. Con un producto de primera línea en el mercado continental de autobuses, como es el nuevo chasis, la antigua Setra puede convertirse, además, en la cabecera de un importante tejido industrial a su alrededor.
Tal y como ocurre con la planta de Robert Bosch en Treto, en torno a la cual se intenta promover un parque de proveedores, EvoBus ha mostrado también su interés en atraer a las cercanías de la fábrica de Sámano, a las empresas que le suministran componentes o realizan para ella diversas tareas complementarias (mantenimiento, mecanizado de piezas, etc.). La puesta en marcha de esta nueva línea de producción podría suponer un fuerte impulso hacia la formación de un parque de proveedores de la multinacional germano-americana en el polígono de Vallegón.