Los componentes del nuevo chasis de EvoBus se fabricarán en Vitoria
A finales de abril o en los primeros días del mes de mayo comenzarán a rodar por las carreteras españolas las primeras unidades de autobuses Mercedes Benz dotadas con el nuevo chasis que EvoBus ha comenzado a fabricar en la planta de Sámano (Castro Urdiales). Aunque la producción en cadena todavía no ha dado comienzo, diversas unidades de preserie se han vendido ya a algunos de los clientes habituales de Daimler-Chrysler, matriz de EvoBus, que serán los primeros en probar las cualidades del nuevo chasis, el OC500, cuya producción irá destinada en un 70% al mercado exterior.
Implantar esta nueva línea de fabricación en la factoría de Sámano –cuya inauguración oficial no tendrá lugar hasta el mes de junio– ha requerido una inversión cercana a los 2.500 millones de pesetas y la creación de 40 nuevos empleos que se incrementarán hasta llegar a los 70 a lo largo del año. Sin embargo, la zona oriental de Cantabria no se va a beneficiar de este proyecto más allá de la creación, sin duda importante, de estos puestos de trabajo. La hipótesis de que esta nueva línea de producción podría servir para impulsar la creación de un parque de proveedores en el polígono de Vallegón, se ha disipado ante el anuncio de que se levantará una fábrica en Vitoria para producir los componentes metálicos del chasis, y que tareas complementarias como el tratamiento anticorrosivo de estas piezas, serán efectuadas también por empresas asentadas en la capital alavesa.
Un contrato hasta el 2005
A partir del primer semestre de este año, Fermisa, una nueva empresa creada bajo la fórmula de join venture por dos de los habituales proveedores de la multinacional Daimler-Chrysler –la corporación alemana Michel y el grupo vitoriano Fervilor–, será la encargada de suministrar los elementos metálicos del chasis en cinco módulos diferentes que luego serán ensamblados en la planta de Sámano. Esta nueva sociedad dará trabajo a cerca de 50 personas y se ha comprometido a suministrar durante este año módulos suficientes para montar 280 chasis. La cantidad se duplicará el año que viene y alcanzará las 1.200 unidades a partir del 2003.
El contrato de suministro que EvoBus ha firmado con esta nueva empresa tiene una duración inicial de cinco años, y el volumen de facturación a que dará lugar cuando se encuentre a pleno rendimiento es de 4.000 millones de pesetas.
La tecnología para la fabricación de estos componentes la aportará la corporación alemana Michel, que ha producido hasta ahora los elementos ensamblados en Sámano. Michel, que cuenta con una plantilla de 700 trabajadores, trasladará esta producción desde su central de Saarbrücken a Vitoria.
El otro integrante de esta join venture, el grupo vitoriano Fervilor, está participado por la empresa fabricante de bicicletas BH y es uno de los muchos proveedores de la factoría de furgonetas Mercedes-Benz que existe en la capital alavesa.
El aprovechamiento de sinergias entre proveedores ya consolidados y el deseo de no alterar la calidad de los componentes, han sido, según fuentes del grupo, las razones que han llevado a Daimler-Chrysler a no buscar nuevos suministradores entre las empresas locales cercanas a Sámano.
El proveedor habitual de la multinacional, el consorcio alemán Michel, al que se pidió que situará una fábrica en una zona próxima a la planta castreña, ha optado por la firma alavesa como socio industrial para fabricar los componentes del nuevo chasis de EvoBus, en detrimento de empresas de Cantabria, donde existe un poderoso sector de industrias auxiliares de la automoción cuya participación como proveedores habría simplificado notablemente los problemas logísticos.
