Nada es como parece
EL ROJO SANTANDER TIÑE EL FUTBOL AMERICANO.– La Copa Libertadores de fútbol, la Champions Suramericana, llevará durante los cinco próximos años el apellido ‘Santander’. El Banco cántabro ha decidido patrocinar el evento, al tratarse de un acontecimiento con más de 1.500 millones de seguidores, que le va a dar aún más visibilidad en todo un área donde tiene 4.500 oficinas y 23 millones de clientes.
BLINDAJES EN CASA, LIBERALISMO FUERA.– ¿Alguien recuerda cuando a Bernotat, presidente de E.On, se le consideraba en España campeón del liberalismo, frente al intervencionismo retrógrado del Gobierno, que ponía trabas a su opa sobre Endesa? Pues el mismo Bernotat, que decía que en España no se puede hacer negocios, acaba de pedir a la presidenta alemana que ponga todos los medios para impedir que las compañías rusas se hagan con el control de las empresas energéticas germanas. No estaría de más que quienes se escandalizaban por los recelos gubernamentales ante el hecho de que la primera empresa eléctrica española quedase en manos extranjeras, se escandalizasen lo mismo por el cambio de opinión de Bernotat cuando el asunto le afecta a él mismo o por el blindaje de Francia a su sector energético, con el control público de Suez.
EL PRECIO DE UN SILLON.– Es conveniente estar en algunos sitios y, en opinión de los norteamericanos, al precio que sea. El magnate Donald Trump ha pagado 50.000 dólares por ocupar un sillón cercano a la empresaria española Esther Koplowitz durante el homenaje que le tributó a ésta la Cámara de Comercio España-Estados Unidos. Al margen de que al final no pudieran ir ni Koplowitz –por un asunto familiar– ni el propio Trump, no deja de sorprender esta política de asignación de asientos en un banquete en función de lo que el invitado está dispuesto a pagar por él. Aunque resulte insólito para la mentalidad española, hay que reconocer que resuelve dos problemas: es un magnífico sistema de obtención de recursos para la entidad convocante y evita cualquier conflicto de protocolo; simplemente, el que paga más, se sienta más cerca.
CAMBIO DE OPINION.– Hace unos meses, los bancos medianos deslumbraban en la bolsa española. Pero, en pocas semanas han perdido 16.000 millones de valor y quienes les auguraban nuevas glorias, como consecuencia de operaciones corporativas o por la agilidad de su gestión, ahora solo ven incertidumbres sobre su futuro como consecuencia de una excesiva concentración en el negocio hipotecario. Un ejemplo más de la volubilidad de los analistas.
OTRO FRANCES MAS.– La finura de la diplomacia vaticana para lograr lo que desea va a acabar siendo sustituida por la francesa, al paso que vamos. El país vecino acaba de llevarse el gato al agua al obtener para el exministro socialista Strauss-Kahn la presidencia del FMI, dejada vacante por el dimitido Rodrigo Rato. Que el cargo haya pasado a otro europeo no ha sido fácil, pero tampoco sorprendente. Lo que sí llama la atención es que Francia también concentre la presidencia del Banco Central Europeo, con Trichet; la de la Organización Mundial del Comercio, con Lamy, y la del Banco Europeo del Desarrollo, con Lamierre. Y eso un país que está deprimido por su pérdida de peso internacional.
BAJA PRODUCTIVIDAD DE LOS FUNCIONARIOS.– El informe realizado por el BBVA sobre la productividad de los españoles no deja muy bien parado a nadie, pero sobre todo al sector público. Aunque tanto el empleo privado como el que depende de las Administraciones no alcanzan los promedios de productividad europeos, en el caso de los funcionarios la distancia es muy grande. Desde 1980, la productividad por empleado del sector privado en España ha crecido un 49%, mientras que en el sector público sólo ha mejorado en un 16%, quizá porque la mejora se ha diluido a consecuencia del gran número de contrataciones realizado en las administraciones locales y autonómicas, que emplean mucho más personal en las competencias asumidas de lo que utilizaba el Estado. Aunque no todas las tareas públicas pueden medirse, el estudio se considera bastante representativo de los males que aquejan a este sector.