El Ebro se empieza a desbordar en Reinosa
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha anunciado que el río Ebro se está empezando a desbordar en Reinosa, una circunstancia que «preocupa muchísimo» al Gobierno tras las graves inundaciones que sufrió la capital campurriana en diciembre de 2019.
Revilla ha visitado hoy Ampuero, inundada por el río Asón tras las fuertes lluvias, y ha afirmado que se «está dando la tormenta perfecta, que es lluvia, mucha nieve y una elevación de la temperatura de ayer a hoy, con lo cual está derritiéndose la nieve».
El presidente, que ha comentado que en Ramales se ha batido el récord histórico de precipitaciones, ha subrayado que al Gobierno le preocupa «muchísimo» Reinosa, pese a las «grandes obras» que se han realizado este verano para tratar de mejorar el cauce. «Ya nos dicen que el Ebro se empieza a desbordar», ha indicado, apuntado que todos los años la zona sufre inundaciones.
En este sentido, la consejera de Presidencia, Paula Fernández, que, como Revilla, se ha desplazado el puesto avanzado de Ampuero para seguir las intervenciones de los equipos de emergencia en la zona, ha expresado que en el Ejecutivo están «muy preocupados» con la situación del Ebro y del Híjar, porque las temperaturas en Campoo son altas y está lloviendo en toda la cuenca, con lo que «la preocupación y el seguimiento es máximo».
Además, tanto Revilla como Fernández han advertido que a las 12.00 horas es la pleamar, con lo que problema «se puede agudizar todavía más», y sobre todo en las cuencas del Pas y el Asón, a lo que se suma que seguirá lloviendo hasta las 00.00 horas de hoy, de modo que el presidente augura «un día complicado».
Al respecto, Revilla ha advertido que estas situaciones serán más habituales «cada día» debido al cambio climático. «Nos hemos tirado sin llover una gota en Cantabria en septiembre y octubre y de repente, pues viene una cosa de éstas», ha señalado, apuntando que por eso es necesario estar «preparados y habituados a que esto sea ya más frecuente y prepararnos tomando medidas, limpiando los cauces de los ríos».
Una limpieza que, ha recordado, no es de competencia sino de las confederaciones hidrográficas, tanto del Cantábrico como del Ebro, y que «ofrece muchas dificultades», por ejemplo de obtención de permisos e incluso «multas» cuando «se toca un cauce de un río».
No obstante, ha destacado que este año en Cantabria se ha invertido y realizado obras en los cauces de los ríos con ayuda del Gobierno regional.
Y ha insistido en que es necesario limpiar los cauces «constantemente» ante un problema «que cada día va a ser más habitual», ha reiterado.
En relación con la atención de las inundaciones, Revilla ha asegurado que en Cantabria «tenemos muy buenos medios» y «lo primero que hay que evitar es que no haya ninguna desgracia».
«Si no hay algún acontecimiento especial, lo tenemos controlado, pero también hay que sacar alguna gente que está aislada en las casas y luego viene el momento de evaluar daños y reparar las zonas inundadas, comercios…, lo de todos los años, que esto ya es muy habitual y cada día va a ser más no solamente en Cantabria», ha remarcado.
Al hilo, Fernández ha apuntado que, como ha dicho el presidente, «lo primero son las personas» en la atención de la emergencia, y posteriormente, en la fase de recuperación, se analizará lo ocurrido y comenzará la tramitación para pedir al Estado «los decretos de las zonas, dependiendo de la situación en la que estemos, y cómo valoremos la situación».