ACEFAM expresa su apoyo al Grupo Álvarez por la huelga en Aspla y critica la postura de los políticos
La junta directiva de la Asociación Cántabra de Empresa Familiar (ACEFAM) ha expresado su «más firme apoyo» a la familia Álvarez, del Grupo Armando Álvarez, propietaria la fábrica Aspla de Torrelavega, que vive una huelga indefinida desde hace doce días, así como su «perplejidad» por la postura de los políticos ante este conflicto.
En un comunicado, ACEFAM señala que en estos días «nuevamente se está poniendo en entredicho el esfuerzo y la aportación de las familias empresarias al bien común», en este caso a los «artífices del mayor motor de prosperidad y bienestar social de la comarca», y reprocha a los políticos locales «tomar partido participando en manifestaciones y asumiendo una actitud totalmente populista en este año electoral».
«Estamos convencidos de que la familia Álvarez no está pensando en otra cosa que no sea hacer sostenible el grupo en años tan inciertos para la actividad empresarial. Inquietud, conciencia y responsabilidad son virtudes de una familia empresaria. Sin embargo, parece que
nadie quiera apreciarlas en estos días», señala ACEFAM
Asimismo, y «sin entrar en detalle» en los términos de negociación que estén teniendo las partes en este conflicto laboral, la asociación asegura que la gestión de la familia y su grupo de dirección «es ejemplar y sostenible». «Álvarez nunca dejará a nadie atrás y sus condiciones de trabajo siempre serán las mejores», enfatiza.
Según ACEFAM, la empresa familiar «lleva años intentando» hacer ver a la sociedad que no son «empresarios de puro y chistera», sino personas «trabajadoras e ilusionadas» por mantener vivo el legado de sus padres, sin embargo «no encuentran respuesta» a su «esfuerzo» y «sacrificios en cierta parte de la sociedad».
«Nos sentimos caricaturizados y absolutamente frustrados cuando nuestros representantes políticos se manifiestan del lado de las personas que nos juzgan de esta manera. Si no nos quieren, no nos representan», apostilla. A su juicio, «lo más fácil es decir que el empresario es el fuerte y usar mensajes simples y populistas contra las familias empresarias».
Por último, ACEFAM asegura no tener no tener «duda» de que Aspla «volverá a la unidad para sortear de la mejor manera los nuevos desafíos que se le plantean en el mercado global». «Hoy no hablamos de una empresa en peligro, sino de una compañía que sigue tirando para adelante a pesar del vacío institucional de los que miran a corto plazo por interés propio», concluye la asociación.