25 compañías cántabras participaron en el XXV Congreso Nacional de la Empresa Familiar celebrado en Cáceres
La Asociación Cántabra de Empresa Familiar, ACEFAM, reivindica su capacidad para generar desarrollo y prosperidad en tiempos de incertidumbre económica. Así se ha puesto de manifiesto durante el XXV Congreso Nacional de la Empresa Familiar que ha concluido recientemente en Cáceres. Un foro en el que han participado más de 500 representantes empresariales de todo el país y que ha contado con una nutrida presencia de familias empresarias de Cantabria.
El Instituto de Empresa Familiar (IEF), en colaboración con la Asociación Extremeña de la Empresa Familiar (Aeef) y el patrocinio de Banco Santander y KPMG, es el impulsor de esta cita en la que, entre otras muchas actividades, se ejecuta una encuesta de precepción económica. A pesar de que los empresarios familiares consideran que la situación es peor que la del año pasado (4,59 frente al 4,91 de 2021), ACEFAM aboga por la capacidad de resiliencia y la experiencia de las empresas familiares como principal antídoto contra las circunstancias adversas.
“Si algo hemos demostrado las empresas familiares es que sabemos trabajar en tiempos de dificultad” indica Alciturri. “Lo hicimos durante la parte más dura de la pandemia y estamos preparados para volverlo a hacer ahora” indica el presidente de asociación cántabra. “Ni nos fuimos entonces, ni nos iremos ahora” concluye.
25 miembros de las familias empresarias de Cantabria han conformado la comitiva de ACEFAM durante este evento, en el que se ha destacado la vocación de perdurar en el territorio y la constante innovación de este tipo de compañías. “En estos tiempos convulsos, es cuando la sociedad puede valorar mejor la enorme contribución que realizan las empresas familiares” indicó Alciturri.
En este sentido, el presidente de la territorial cántabra hizo suyas las palabras de Andrés Sendagorta para dignificar el papel de los empresarios familiares, “muy alejado de la leyenda negra de puros y chisteras”. Del mismo modo, se sumó al representante del IEF a la hora de solicitar que “impere la reflexión y el análisis riguroso por parte de nuestros políticos a la hora de definir medidas que inciden en nuestra actividad”.
Proyectos con compromiso
Las empresas familiares de Cantabria también estuvieron representadas en la presentación de la iniciativa “Proyectos con compromiso”. Se trata de una muestra de las iniciativas vinculadas con la sostenibilidad medioambiental, social y empresarial desarrolladas durante el último ejercicio por familias empresarias vinculadas a diferentes asociaciones territoriales.
Textil Santanderina, que celebrará su centenario en 2023, sobresale por la integración de la sostenibilidad en todas las áreas de actividad y gestión. No en vano, fue las primeras empresas españolas en adherirse al Pacto Mundial por la Sostenibilidad de la ONU de 2001. Fruto del convencimiento de la cúpula directiva y del trabajo intenso del equipo, presentaron el concepto S360º: un sentido de economía circular para un nuevo ciclo de la producción textil.
Bajo ese paraguas, Textil Santanderina ha sido capaz de convertir residuos textiles en tejidos de alta calidad para la confección de nuevas prendas utilizando técnicas de reciclaje y supra reciclaje; extender el ciclo de vida de las fibras; reducir la demanda de materias primas de ultramar o recuperar prendas que cada año acaban en vertederos o incineradoras entre otras muchas acciones. En definitiva, ha logrado recudir el impacto medioambiental de la actividad y prevenir la proliferación de residuos.
Otros proyectos presentados fueron los de empresas familiares como Estrella Galicia, Grupo Sesé, Velatia, Artiem, Grupo Juste, Enhol, Incarlopsa, Instituto Español, Inquiba, Grupo Erum, Hijos de Luis Rodríguez, Primafrio, Sagalés, Importaco, Hiperdino, Garnica o Castilla Termal.
El foro empresarial más importante de EspañaSu Majestad el Rey Felipe VI fue el encargado de inaugurar esta cita, considerada por muchos como el foro empresarial más importante de España. “El Latido de España” ha sido el lema escogido por el Instituto de Empresa Familiar para significar el rol fundamental de estas organizaciones a la hora de mantener el estado del bienestar. “Solo las cien empresas familiares agrupadas en el IEF emplean a un 1.100.000 personas; facturan 172.000 millones de euros y generan un valor añadido bruto de 43.500 millones de euros” indicó Andrés Sendagorta.
El presidente del IEF garantizó el compromiso de las familias empresarias para continuar impulsando la economía y generando riqueza. “Las empresas familiares reflejan mejor que nadie la realidad de España, su potencial y su compromiso con la sociedad que queremos construir para las nuevas generaciones” manifestó en el discurso de clausura del congreso.
Cabe recordar que las empresas familiares son la base del tejido empresarial europeo. Una circunstancia que también se produce en Cantabria en donde las familias empresarias generan el 82,5% del empleo privado y suponen el 61,8 % del PIB. Ambas magnitudes dan idea de la importancia que tienen en el sostenimiento y desarrollo del estado del bienestar. Una contribución constante en el tiempo, ya que las empresas familiares son más longevas que las no familiares.
